Investigadores de la Universidad Autónoma Chapingo (UACh) desarrollan un biodigestor que producirá energía eléctrica al aprovechar el gas metano que genera el excremento de las vacas y otros rumiantes.
Con la energía obtenida se podrán encender al mismo tiempo hasta cuatro mil focos, pues se generan de entre 40 a 60 kilowatts por hora.
El proyecto que se lleva a cabo en el establo de la UACh, al que se destinaron más de ocho millones de pesos, se convierte en una alternativa para los pequeños productores del país, dijo Carlos Antonio Apodaca Sarabia, investigador del departamento de Zootecnia.
Además de generar energía eléctrica, el proyecto contempla la reducción de la contaminación que genera el estiércol de los animales que, en la mayoría de los casos, se deposita en la red de drenaje.
Sergio Mendoza Pedroza, director del Departamento de Zootecnia, señaló que el establo de la UACh fue diseñado para el confort y sanidad de los rumiantes, lo que permitirá incrementar la producción de leche de 17 a 25 litros diarios por cada vaca.
“Una vez que el excremento y los residuos estén en las celdas de captación, serán conducidos por ductos plásticos a un pozo para homogeneizar y luego a una maquina separadora de sólidos. Las partículas pequeñas y el agua son concentradas en un biodigestor y las grandes para la composta. También habrá dos lagunas, una de oxigenación y otra de aguas limpias que será reempleada en el mismo proceso”, dijo Sergio Mendoza.
El biodigestor tiene una capacidad para aprovechar el excremento de 240 vacas.
(Con información de El Universal)