Voces del Periodista Diario

Sobre los sueños guajiros de Graco

EL LECHO DE PROCUSTO Por: Abraham García Ibarra

 

En todos lados se cuecen habas. En eso de las tramas electorales, sólo cambian el mandil y los utensilios del cocinero. El caso es que a la justicia electoral no se le da reposo y el menú termina por quemarse o acedarse.

El PRI, tanto en el ámbito federal como en el estatal, abusando de su condición de mayoría  o comprando los votos de obscenas y baratas minorías en los congresos, casi siempre se sale con la suya. Pero a veces se le invita una sopa de su propio chocolate.

El cacique de cuello blanco tabasqueño, Graco Ramírez Garrido Abreu, que olvidó que en una época su estado fue promisorio “laboratorio de la democracia”, ahora que truena sus chicharrones en Morelos, ha convertido esta entidad en letrina de todas las materias fecales.

El esférico y colérico Ramírez -que sueña con ocupar Los Pinos el 1 de diciembre de 2018- tiene el control de la legislatura estatal mediante la fracción-facción del PRD.

Una reforma reeleccionista

La bancada amarilla planchó el dictamen de una iniciativa de reforma al Código de Instituciones y Procedimientos Electorales de Morelos, por la que se pretende la reelección de diputados hasta por tres periodos consecutivos y alcaldes por uno.

Las oposiciones acusaron a la Comisión de Asuntos Constitucionales, que preside el perredista Enrique Laffitte Bretón (con vínculos familiares con Ramírez), de haber dado un albazo al meter súbitamente en la agenda parlamentaria ese tema, cuyo dictamen final no había sido dado a conocer oportunamente a los diputados.

Obviamente, los opositores alegaron que la reforma tiene dedicatoria expresa en favor del PRD.

El PRI, que en el congreso estatal está arrinconado en una minoría, sonsacó a las representaciones del PAN, Encuentro Social, Nueva Alianza, Humanista (que ya perdió su registro nacional) y Morena para que presentaran una acción de inconstitucionalidad contra la dicha reforma ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

Hace unos días, los promoventes fueron notificados por la Corte que se había aceptado aquel recurso. No se precisan fechas para desahogar las diligencias al respecto.

Aquí la imaginaria: ¿Qué tal si el rechoncho guajiro Ramírez, como delira ahora,  llega a Los Pinos en 2018? Veríamos que es absolutamente probable que promoviera una iniciativa para la reelección presidencial. Entonces tendríamos Graco para 24 años.

Nos veríamos obligados a consultar, no a los arqueólogos, sino a los siquiatras para saber por qué la democracia a la mexicana  está a punto de ser confinada en una bartolina. Si hay por ahí una camisa de fuerza, urge. ES cuanto.

Articulos relacionados

8-A Reza: Al maestro con cariño

¿De qué se ríe, señor senador?

Redacción Voces del Periodista

Robo hormiga en Débito: Negocio redondo

Redacción Voces del Periodista