La Diputación Permanente de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) pidió sancionar a quienes realicen llamadas falsas a los servicios de emergencia de la ciudad.
A través de un punto de acuerdo promovido por la diputada local Elizabeth Mateos, se pidió al secretario de Seguridad Pública de la ciudad, Hiram Almeida, realizar las acciones necesarias para concientizar a la ciudadanía sobre las consecuencias de las llamadas de emergencia falsas, y aplicar las sanciones correspondientes a quienes las realicen.
Y es que, recordó que de acuerdo a cifras de la dependencia capitalina en enero pasado el 066 recibió un millón 765 mil 479 llamadas, de las cuales 88 por ciento fueron falsas. En tanto, durante 2015 se hicieron 30 millones 880 mil llamadas, de las cuales el 77 por ciento no eran reales.
“Al recibir llamadas falsas no sólo se desperdician recursos que son necesarios para las verdaderas emergencias, sino que se puede retrasar la atención de verdaderas contingencias”, destacó.
La ex delegada en Iztacalco recordó que actualmente la tecnología permite rastrear las llamadas falsas, de esta forma —dijo— se puede sancionar a quienes hacen mal uso de las solicitudes de auxilio por esta vía, “aunque no toda la gente sabe que las sanciones ya están contempladas en la Ley de Cultura Cívica de la Ciudad de México”.
Recordó que esta norma considera que proferir voces, realizar actos o adoptar actitudes que constituyan falsas alarmas de siniestros o que puedan producir o produzcan el temor o pánico colectivos, se sancionan con multa equivalente de 21 a 30 veces la Unidad de Cuenta de la Ciudad de México o con arresto de 25 a 36 horas.
“La movilización de un servicio de urgencia puede costar en promedio de mil 500 hasta tres mil 500 pesos cada una, dependiendo de la distancia que se recorra, además del tiempo de respuesta perdido para el personal, el cual puede llegar hasta los 29.7 minutos cuando la media establecida por organismos internacionales oscila entre cinco y 10 minutos”, expuso Elizabeth Mateos.
