El Papa Francisco ayudó a rescatar a nueve migrantes sirios, a los cuales les consiguió casa y sustento, luego que en abril pasado sorprendió al mundo al regresar a Roma con 12 refugiados desde la isla griega de Lesbos.
La Santa Sede detalló este viernes que se trata de seis adultos y tres niños, dos de ellos de religión cristiana, quienes fueron acompañados a la capital italiana por la Gendarmería Vaticana, con la colaboración del Ministerio del Interior de Grecia y el Servicio Griego de Asilo.
Los nueve ciudadanos sirios, que estaban en el campo de refugiados de Kara Tepe, llegaron provenientes de Atenas este jueves y fueron recibidos por la Comunidad de San Egidio, el movimiento católico que les proveerá habitación y los ayudará a conseguir trabajo.
“El renovado gesto de Francisco hace comprender a todos que no son los muros, sino la acogida y la inclusión, la verdadera alma de Europa y la base para repensar el futuro”, indicó la Comunidad de San Egidio, a través de un comunicado.
Esa organización impulsa la iniciativa “Corredores humanitarios”, junto a la iglesia evangélica, gracias a la cual el jueves llegaron a Roma 81 refugiados sirios.
Los “Corredores Humanitarios”, que permiten a los migrantes llegar a Europa en forma coordinada y segura, han hecho posible que unos 280 refugiados procedentes de Líbano hayan sido acogidos en Italia desde febrero pasado.
Un modelo que “funciona” y puede ser “replicable” en los otros países de la región, apuntó San Egidio.
