El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha advertido este miércoles de que habrá consecuencias si la violencia continúa en Ucrania, al tiempo que ha afirmado que el Ejército ucraniano no debería intervenir en una situación que puede ser resuelta por civiles.
En declaraciones a la prensa antes de una reunión con el presidente de México, Enrique Peña Nieto, Obama ha asegurado que condena la violencia en Kiev en los términos más duros y que cree que aún es posible una solución pacífica a la crisis que sufre el país.
Washington está estudiando distintas opciones para la acción política, incluyendo la imposición de sanciones, en vista de los actuales acontecimientos en Ucrania. Sin embargo, la decisión definitiva sobre el asunto todavía está pendiente, según informó la portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Marie Harf.
EE.UU. ha anulado los visados a algunos funcionarios de Ucrania, dijo en una rueda de prensa el embajador estadounidense en Kiev, Geoffrey Pyatt. El diplomático explicó que se cree que aquellas personas sancionadas estaban vinculadas directamente al uso de la fuerza en Maidán.
Los últimos enfrentamientos entre manifestantes y agentes de las fuerzas de seguridad en Kiev han causado la muerte de 26 personas. El Gobierno ucraniano ha anunciado este miércoles la puesta en marcha de una operación antiterrorista para poner fin a lo que ha definido como una amenaza “extremista”.
El número de los participantes de los disturbios callejeros en Kiev que han acudido a la asistencia médica este martes y miércoles llega a 388 personas, informan las autoridades sanitarias. 277 de ellas han sido ingresadas en los hospitales de la capital ucraniana con quemaduras y otras heridas producidas durante los enfrentamientos con la Policía.
(Con información de Reuters/EP y actualidad.rt.com)