La Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), desecho ayer, con ocho votos contra tres, el proyecto de sentencia presentado por el ministro Alberto Pérez Dayán, que marcaba diversas limitantes para que los medios de comunicación ejerzan la libertad de expresión, y proponía que cualquier persona podría hacer uso del Derecho de Réplica al sentirse “agraviada” por la publicación de información, pese a que ésta fuera cierta y exacta.
Es decir, la propuesta de Pérez Dayán consistía en agregar al articulado del Derecho de Réplica la palabra “agraviada” a las causales para que cualquier persona pudiera pedir judicialmente ese derecho a los medios informativos.
La propuesta desechada otorgaba facultad a la persona, física o jurídica, que se considerara perjudicada en su honor, prestigio o dignidad, por una información, noticia o comentario, publicada en un medio de comunicación, y que le lleva a exigir la reparación del daño sufrido mediante la inserción de la aclaración.
El presidente de la SCJN, Luis María Aguilar, explicó que, con el rechazo mayoritario al proyecto en su integridad, tendrá que ser retornado y reformulado, si es el caso, para presentar en un futuro uno nuevo.
Durante el desahogo del proyecto, el ministro Pérez Dayán insistió en que la libertad de expresión “no es un derecho absoluto pues encuentra su límite en el respeto a los derechos de los demás”.
Sin embargo, ante el rechazo manifiesto de la mayoría de sus colegas, presentó dos alternativas para generar un consenso hacia su proyecto, pero ninguna de las dos convenció al resto de los ministros, quienes advirtieron que se trataba de lo mismo, “pero por otro camino”, por lo que anticiparon que, si se ponían a votación, serían también votados en contra.
Lo anterior hizo que el propio ministro ponente anunciara el retiro de ambas propuestas y pidiera que se sometiera a votación su proyecto en los términos en que fue presentado, que fue por la inconstitucionalidad del Derecho de Réplica, sobre el cual, dijo, mantendría su voto a favor.
Aunque con matices, votaron en favor del proyecto, además del propio Pérez Dayán, el presidente de la Suprema Corte, Luis María Aguilar, y su colega Eduardo Medina Mora.
Así que, en contra, votaron las magistradas Norma Piña y Margarita Luna Ramos, y los ministros Arturo Zaldívar, José Ramón Cossío, Fernando Franco, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Mario Pardo Rebolledo y Javier Laynez Potisek.
Estos ocho ministros no aprobaron la propuesta de su colega Pérez Dayán de que la libertad de expresión encuentra sus límites cuando afecta otros derechos como el de la moral y buena reputación.
Basado en los preceptos constitucionales, el ponente aseguró que “En la Constitución no dice si es una información inexacta, si es verdadera, si es falsa, si es descontextualizada, si es incompleta o suficiente, lo que dice es que la manifestación de las ideas tiene como límite que no se ataque a la moral”.
Cuestionó: “¿Se puede atacar a la moral con alguna verdad?, claro que sí, pero principalmente se puede atacar la vida privada a través de la expresión de hechos ciertos”.
Jorge Mario Pardo Rebolledo, en su exposición, rechazó el proyecto al considerar que criterios de falsedad e inexactitud en la publicación de información pueden agraviar a una persona.
(Nota de Luciano Franco para La Crónica)