Tres delincuentes, dos de ellos menores de edad, fueron detenidos tras amagar y asaltar a dos jóvenes que salían de un bar ubicado en calles del Centro Histórico de la Ciudad de México.
Cámaras de seguridad del Gobierno capitalino captaron el momento en el que las víctimas son acechadas y seguidas por los delincuentes, quienes de forma violenta los toman por el cuello para despojarlos de sus pertenencias.
Mientras dos de ellos los someten, su cómplice hurga entre las bolsas para robarles los objetos de valor y al final los dejan tirados en el piso.
Posteriormente, los ladrones huyen del lugar y de manera cínica se quedan platicando afuera de una vecindad en la calle de enfrente.
Sólo 20 minutos después, las cámaras captaron nuevamente al ladrón que quitó sus cosas a las víctimas, cuando cruza la avenida e ingresa al bar en el que estaba bebiendo.
Lo que el delincuente no sabía es que ya era observado, a través de una cámara ubicada sólo a unos metros del lugar.
Desde el Centro de Monitoreo de la Policía capitalina, un agente vigilaba en vivo los movimientos de los delincuentes, para desde ahí coordinar el envío de patrullas a la zona.
En motocicletas y patrullas, los uniformados se acercaron al establecimiento.
“El C2 nos marca una emergencia, que acababan de robar, uno de ellos se mete al bar”, detalló el agente de la Secretaría de Seguridad Pública capitalina (SSP), Gorgonio García.
Las imágenes muestran cuando el policía entra al negocio para encarar al delincuente.
“La persona se mete hacia el bar, yo llego al establecimiento sobre la banqueta y a lo lejos veo hacia adentro varias personas y esa misma persona lo voy viendo que se va sentando en una de las mesas”.
“Me acompañas de la manera más atenta o lo podemos hacer de la otra manera, se jalonea lo levanto del cinturón y procedo con el aseguramiento, lo saco del establecimiento”, narra el policía.
Se observa que el sujeto incluso cambió su vestimenta para tratar de despistar a las autoridades, pero eso no evitó que fuera detenido.
Se trata de Fabián García Gallardo de 36 años de edad, quien ya había estado en una ocasión en la cárcel. Sus cómplices, menores de edad, también fueron detenidos.
(Nota de Carlos Jiménez para Excélsior)