El Instituto de Vivienda local tiene detectadas cerca de 700 organizaciones dedicadas a invadir casas, edificios y predios de forma irregular en las 16 delegaciones de la Ciudad de México.
Sin embargo, según un estudio interno de la dependencia a cargo de Raymundo Collins, son 23 organizaciones las que con mayor frecuencia invaden inmuebles, por lo que ya han sido sancionadas por las autoridades correspondientes.
En la lista negra se encuentran la Asamblea de Barrios, El Frente Popular Francisco Villa, Consejo Democrático Chinampa de Juárez, Antorcha Campesina, Provivienda Independiente Ticomán, La Hormiga, Comité Urbano Popular Azteca, entre otras.
Datos de la Procuraduría General de Justicia local señalan que en los últimos años, se presentaron mil 426 denuncias por despojo, aunque la dependencia, a cargo de Rodolfo Ríos, aclaró que no necesariamente se trata de inmuebles.
Peor resulta saber que algunas de las asociaciones antes mencionadas ya cuentan con filiales, tal es el caso del Frente Popular Francisco Villa, que cuenta con subgrupos: Frente Popular Francisco Villa Independiente y Frente Popular Francisco Villa Siglo XXI, todos ellos, dedicados a la invasión de predios, principalmente en la zona oriente de la ciudad.
En tanto que la Asamblea de Barrios cuenta con 14 ramas.
Asimismo, hay agrupaciones que son dirigidos por ex funcionarios y militantes de algunos partidos, como por ejemplo, la asociación Tierra y Libertad, que es encabezado por el ex delegado de Tláhuac, Francisco Martínez Rojo.
Los hermanos López Villanueva, Alejandro y Adolfo, también cuentan con un grupo dedicado a “luchar por la vivienda”, y la mayoría de sus integrantes, que se identifican con el FPFV, ahora son simpatizantes de Andrés Manuel López Obrador.
Siguiendo la línea morenista, Jaime Reyo, quien alguna vez militara en el sol azteca, tiene las agrupaciones “UPRES” y “Base Estrella”, las cuales trabajan en la delegación Iztapalapa y están protegidas por la ex delegada Clara Brugada.
Jesús Valencia, ex delegado de Iztapalapa, a través de la agrupación “CUFAS” llevó a cabo invasiones en predios que pertenecen a la reserva ecológica en la zona conocida como Las Maravillas.
A su vez, el ex delegado de Tláhuac, Gilberto Ensástiga, cuenta con su grupo, Unión de Colonias Populares, que también se dedica a la invasión de terrenos.
CINCO DELEGACIONES, VULNERABLES A LAS INVASIONES
Diputados de la Asamblea Legislativa informaron que hay cinco delegaciones: Cuauhtémoc, Iztapalapa, Miguel Hidalgo, Benito Juárez y Tláhuac, con el problema de invasiones.
Lo anterior porque poseen suelo de uso de conservación ambiental y edificaciones antiguas, cuya situación legal está en disputa o están desocupadas.
La presidenta de la Comisión de Vivienda en la Asamblea Legislativa, Dunia Ludlow, comentó que las asociaciones están acostumbradas a invadir áreas naturales, como es el caso de Iztapalapa y Tláhuac.
En el caso de Benito Juárez, Miguel Hidalgo y Cuauhtémoc, comentó la diputada priista es donde mayor número de casas abandonadas existen.
La diputada comentó que a través de un punto de acuerdo solicitó al Invi que transparente toda la información que posea de viviendas de interés social con las que se benefician las organizaciones invasoras.
“Estas organizaciones no están reconocidas ante la ley, están reconocidas en las reglas de operación del Invi, eso de alguna forma propicia que no tengamos control sobre las organizaciones”, aseveró la diputada priista.
Y agregó “Estamos trabajando en el reconocimiento de las organizaciones para fomentar las buenas prácticas, porque hay muchas de ellas que están haciendo las cosas de manera adecuada y legal”.
Sin embargo, la abogada especialista en materia civil, Fernanda Velázquez, aseguró que no existen las invasiones legales, tal como refirió Ludlow.
“Hay una adquisición legal de una propiedad mediante una prescripción positiva la cual se acredita en el juicio civil correspondiente”, refirió la abogada.
Ludlow indicó que la mayoría de las personas que se dedican a la invasión de predios pertenecen a células delictivas.
“Las delegaciones más afectadas son las que poseen suelos de conservación y las que tienen construcciones antiguas”, concluyó.
(Nota de Ana Espinosa Rosete para La Crónica)