En un comunicado, afirmó que “antes de iniciar cualquier vuelo, como el 002 que cubría la ruta Madrid-México, los pilotos de ASPA nos sometemos a filtros estrictos antes de ingresar a nuestras funciones como pilotos”.
Agregó que “cada evaluación está coordinada con la empresa y autoridades nacionales e internacionales, apegadas a las leyes y tal cual se tiene descrito en nuestro manual general de operaciones”.
ASPA de México, añadió, tiene programas permanentes de exámenes toxicológicos, así como de alcoholemia, y destacó que ambas medidas de prevención (en el aeropuerto y de manera interna) cubren a detalle a cada uno de los que trabajan para la empresa Aeroméxico.
Con ello, en ningún momento se compromete la seguridad de las operaciones en los aviones, por lo que ASPA reiteró su garantía de seguridad y respeto al ejercicio de su profesión.
El piloto, del que ni ASPA ni las autoridades han revelado el nombre, se disponía a abordar en Madrid el vuelo 002 de Aeroméxico con destino a la ciudad de México, pero no logró su propósito pues fue detectado en estado inconveniente por personal de la línea.