VOCES DEL DIRECTOR Por: Lic. Mouris Salloum George.
Con la antena en alto y las pilas bien cargadas, el gobernador de Campeche, Alejandro Moreno Cárdenas ha decidido ponerle al buen tiempo buena cara y está tomando todas las medidas, no providenciales, sino las que aconseja el manual del buen estadista, para que la entidad no caiga en la espiral de incertidumbre provocada por fenómenos económicos que están impactando las expectativas de desarrollo nacional.
Moreno Cárdenas ha declarado en guardia continua a su gabinete, para que no se duerma en sus laureles frente a un reto que podría alterar el curso de su proyecto de gobierno, no para las circunstancias, sino para todo el sexenio.
Los funcionarios de los tres niveles de gobierno en Campeche, como lo establece la agenda de todos los días del mandatario, fueron conminados a ser gestores permanentes para fortalecer la coordinación, aplicar la estrategia de activación de la economía y apoyar al sector empresarial en la obra colectiva de impulsar el potencial productivo que se refleje en la creación de empleos y un crecimiento más rápido de la economía de los campechanos.
Moreno Cárdenas fue explícito y enérgico en su convocatoria de reconocer el papel que juega el sector empresarial en la sociedad, por su contribución a la generación de fuentes de empleo, papel al que debe retribuirse y encauzarse con el trabajo de gestión y presentación de programas viables a corto y mediano plazo.
El mensaje de Moreno Cárdenas se inscribe en el reconocimiento del respaldo que el presidente Enrique Peña Nieto brinda para la transformación de Campeche; apoyo, dijo, que no tiene precedente alguno en la entidad.
Obviamente, la convocatoria de Moreno Cárdenas se inserta en la reciente decisión del presidente Peña Nieto de incluir a Campeche, con el estado de Tabasco, en el diseño de una nueva Zona Económica Especial para hacer frente a las consecuencias adversas derivadas de la erosión de los precios petroleros que está afectando las finanzas públicas del gobierno central y, en consecuencia, las participaciones federales a los estados.
La planeación del desarrollo de Campeche, pues, no se basa en la coyuntura. Tiene que ver con proyecciones estructurales de largo plazo, que son las que reditúan rendimientos a la población en su conjunto.