El presidente Enrique Peña Nieto encabezó la ceremonia luctuosa en memoria de los policías federales caídos en el cumplimiento de su deber, al desplomarse el helicóptero en el que viajaban rumbo a la comunidad “La Pintada”, en Guerrero que había sido sepultada por un alud de lodo causado por las intensas lluvias.
Los policías homenajeados desde el monumento al Policía Federal Caído en las instalaciones de la cooperación en Iztapalapa son Enrique Briceño Martínez, Desiderio Rosado Zárate, José Ramón Peláez Prado, Isaac Escobar Bustamante y Julio César Zarco Castro.
Pasado el mediodía, el mandatario arribó al monumento en donde acompañado por los secretarios de la Defensa, Salvador Cienfuegos; Marina, Vidal Francisco Soberón; Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong; el procurador General de la República, Jesús Murillo Karam; el gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre Rivero, y el comisionado Nacional de Seguridad, Manuel Mondragón, encabezó una guardia de honor a los elementos de la Policía Federal.
Ante cuatro féretros cubiertos con la bandera y rodeados de flores, el mandatario pidió ofrecer un minuto de aplausos a los policías caídos y reiteró su más sentido pésame a los familiares y seres queridos de quienes murieron en cumplimiento de su deber.
Reiteró que frente a cualquier emergencia proteger la vida de los mexicanos es lo más importante y refrendó que la mejor forma de hacer un homenaje a quienes llamó “compañeros” es seguir trabajando para construir un país mejor en beneficio de todos.
Vestido de luto, el mandatario expresó su respeto, agradecimiento y admiración por los valerosos integrantes de la Policía Federal quienes perdieron la vida en el cumplimiento de su deber, sirviendo a quienes más lo necesitaban en un momento de desgracia, lo cual evidencia su vocación de servicio.
Destacó que los elementos caídos no tuvieron duda de dar un paso al frente para apoyar a los hermanos guerrerenses ante los efectos del ciclón “Manuel”.
Peña Nieto destacó que pese a la adversidad del clima, los elementos volaron de Acapulco a Atoyac de Álvarez a la comunidad La Pintada al rescate de pobladores en riesgo, en una misión conformada por cuatro mil 888 elementos de la Policía Federal, seis helicópteros, mil 700 patrullas, al rescate de 938 damnificados y entrega de más de 88 toneladas de víveres.
Dijo que los policías federales que dieron la vida son una profunda pérdida para México y la corporación, por lo que pidió un minuto de aplausos para reconocer su labor.
Antes, el comisionado de la Policía Federal Enrique Francisco Galindo hizo una semblanza de los elementos que perdieron la vida en el cumplimiento de su deber y aclaró que luego de una “intensa búsqueda hasta hoy fueron localizados los que probablemente son los restos de Isaac Escobar Bustamante”, por lo que no estuvo presente en el homenaje.
En su oportunidad, el comisionado Nacional de Seguridad expresó su solidaridad a las familias de los policías muertos y tras subrayar su ejemplo de servicio, aseguró que previo al día del accidente los elementos ya habían realizado el trayecto y habrían contribuido al rescate de más de 600 personas en desgracia.
Se dirigió a sus familias y particularmente a sus esposas e hijos, con quienes se comprometió a que no quedarán en el desamparo, además de que anunció que los nombres de los policías serán inscritos en letras de oro en el monumento.
Cabe mencionar que el helicóptero Black Hawk de la Policía Federal fue reportado como ilocalizable desde el jueves pasado y posteriormente hallado el domingo estrellado en la zona serrana del estado de Guerrero, se reportó que toda la tripulación perdió la vida.
“Mientras se realizaban tareas de rescate y traslado de víveres en la contingencia generada por la tormenta tropical ´Manuel´ en el estado de Guerrero, un helicóptero Black Hawk sufrió un accidente en el que no hubo sobrevivientes”, informó la Secretaría de Gobernación a través de un comunicado.