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El Senado le saca la vuelta a la revocación de mandato

EL LECHO DE PROCUSTO Por: Abraham García Ibarra

El diputado al Congreso de Sinaloa con licencia y líder del Partido Sinaloense (PAS), Héctor Melesio Cuén Ojeda imputó hoy miedo a los miembros de las comisiones de Dictamen del Senado de la República que tienen en sus manos la iniciativa ciudadana de reforma a la Constitución federal en materia Revocación de Mandato y Segunda Vuelta Electoral, y no la han bajado al pleno de la Cámara alta.

En solidaridad con 250 mil sinaloenses que firmaron esa iniciativa, el senador Manuel Cárdenas Fonseca denunció que inexplicablemente no existe registro senatorial de ese proyecto en grave violación al proceso legislativo y en afrenta a los ciudadanos promoventes, según costa en escrito entregado por el legislador  a la directiva en turno.

Cuén Ojeda se presentó esta mañana en conferencia de prensa en la Ciudad de México, y abordado sobre diversos temas de la agenda nacional, llamó sátrapas a los operadores de la Reforma Educativa y se opuso rotundamente al empleo del garrote para aplicarla.

La iniciativa ciudadana comentada fue recibida en el Senado desde el 23 de septiembre de 2014, horas antes de la tragedia de Iguala, Guerrero, y en primera instancia fue turnada al Instituto Nacional Electoral (INE) para el cotejo de las firmas, que resultó positivo.

Dolorosos costos de una omisión

Se hace alusión al trágico suceso que ahora se conoce como Los 43 de Ayotzinapa porque previamente el senador priista Arturo Zamora promovió la revocación de mandato del gobernador de Guerrero, Ángel Heladio Aguirre; solicitud denegada con las consecuencias que ahora tienen en grave trance a la presidencia de Enrique Peña Nieto.

El senador Cárdenas Fonseca cuestionó expresamente a los presidentes de las comisiones de Gobernación, Cristina Díaz; de Puntos Constitucionales, Enrique Burgos García, y de Procesos Legislativos, Raúl Gracia, que han incurrido en disimulo sobre los temas citados.

Para Cuén Ojeda no puede pasar inadvertido el expedito trámite que en la misma Cámara alta se le dio a la iniciativa de Ley 3 de 3, no obstante que en la promoción inicial, ésta presentó la mitad del número de firmas recogidas en una sola entidad, Sinaloa, para la Revocación de Mandato y Segunda Vuelta Electoral, mientras que la 3 de 3 pasó a firmas por todo el país.

La ley 3 de 3, causa de la contención del paquete de siete constitutivas del Sistema Nacional Anticorrupción, fue promovida por el Instituto Mexicano de Competitividad y el Consejo Coordinador Empresarial; esto es, por las cúpulas de hombres de negocios. La de Revocación y Segunda Vuelta, por ciudadanos de a pie.

Le teman a la Espada de Damocles

Habida cuenta que, si de combatir la corrupción se trata, el líder del PAS considera que la iniciativa sinaloense es una Espada de Damocles que inhibirá conductas reprobables de los funcionarios públicos -de elección popular y de designación administrativa- por lo que se debió dar trámite oportuno a la revocación de mandato antes o al menos paralelamente con las siete leyes anticorrupción.

Argumentó que hay una tendencia en la política internacional de sancionar trasgresiones públicas a la ley, por lo que sorprende que el Poder Legislativo federal no se ponga en la misma frecuencia.

La presencia de Cuén Ojeda en la Ciudad de México obedece a la intención de seguir luchando por la “descongelación” de la iniciativa que lleva ya más de año y medio en el hielo.

En cuanto a la Segunda Vuelta Electoral, alegó que sería la mejor vía para legitimar los gobiernos surgidos de las urnas y evitar los riesgos de ingobernabilidad, como actualmente está sucediendo.

Respecto de la Reforma Educativa, el ex rector de la Universidad Autónoma de Sinaloa explicó que en principio la apoyo en su valoración cualitativa, pero la cuestiona por su reducción al aspecto meramente laboral, sujeto además a acciones coactivas.

El gobierno de Sinaloa rasura y desvía partidas

En otro enfoque analizó el plan de infraestructura para educación básica,  haciendo sin embargo dos observaciones sobre su financiamiento (50 mil millones de pesos),  para cuyo soporte se dispone -además de los bonos específicos expuestos a particulares- de recursos públicos correspondientes a las entidades federativas durante 25 años, aplicados no obstante al plazo que le resta al sexenio.

En ese sentido, criticó que los gobiernos de los estados, particularmente el de Sinaloa, ha echado mano a las primeras partidas, rasurándolas y desviándola a contratistas privados para obras de relumbrón de nuevas universidades (comisiones de por medio), dejando de lado su destino último: Los planteles, sobre todo rurales, que carecen de los más elementales servicios para la impartición de la enseñanza.

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