Voces del Periodista Diario

En 14 meses se conocerá candidato presidencial triunfante

EL LECHO DE PROCUSTO Por: Abraham García Ibarra

Dadas las inconsistencias finales demostradas, entre 2012 y 2016, en las encuestas sobre intención de voto de agencias privadas, buena parte de las veces sujetas a contrato con partidos políticos o candidatos, siempre es bueno explorar opciones demoscópicas procesadas por medios no sujetos a ese tipo específico de interés, relativamente libres de sospechas tendenciosas.

Antes de entrar en materia, un dato que entra en el inventario de la picaresca política mexicana: Lo subrayamos, porque su fuente es el español Antonio Sola.

Para la elección presidencial de 2006, Sola operó como asesor electoral del candidato del PAN, Felipe Calderón. Fue en esa campaña en que acuñó la figura de ¡Peligro para México! asestada al candidato de la Alianza por el Bien de Todos, Andrés Manuel López Obrador.

De no ser broma ociosa de puente largo, Sola acaba de asegurar que el tabasqueño puede ser considerado ahora como “de izquierda moderada” y dice que le gustaría colaborar en su campaña. Quede el asunto entre corchetes.

Lo que anuncia la intención de voto

Vamos al estudio demoscópico al que nos referimos en la entrada de estas notas. Lo retomamos porque cubre el periodo comparativo de noviembre de 2016 al último día de enero de 2017. Corresponde a la investigación de El Financiero, que hizo el sondeo en vivienda.

De acuerdo con los resultados, referidos a partidos sin nombrar candidatos, el PRI habría caído de 28 a 22 por ciento en la preferencia de los consultados; el PAN, de 29 a 25 por ciento y el PRD, de 11 a 9 por ciento. El Partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena) habría mejorado su registro del 18 al 25 por ciento.

Al nombrarse “candidato” ante los encuestados, López Obrador aparece en primer sitio con un 33 por ciento de las preferencias; Margarita Zavala con 27 por ciento. El presidenciable priista mejor posicionado, es el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, quien cayó seis puntos respecto de noviembre: De 26 a 20 por ciento.

Miguel Ángel Mancera, que no acaba de afiliarse al PRD, que se ostenta como gobernante en la Ciudad de México, y el independiente gobernador de Nuevo León, Jaime El bronco Rodríguez, empatan con un 10 por ciento.

Otros estudios, con diversos porcentajes, ora más, ora menos, confirman esas tendencias.

El expediente del Estado de México.

Casi invariablemente, la mayoría de esas encuestas condiciona esas tendencias a los resultados de la elección de gobernador en el Estado de México el próximo 4 de junio, en cuyo caso se concluye que la suerte del gobernador en turno, Eruviel Ávila Villegas hacia 2018, se juega en ese proceso.

Si vale la referencia obvia, la elección de gobernador en el estado de México, como ahora, antecede a la sucesión presidencial.

Hacia 1988, cuando el PRI había pasado por una dinámica de ruptura interna, la oposición de izquierda avanzó vertiginosamente en dicha entidad. Antes de cumplir dos años de su mandato, en septiembre de 1989 el gobernador Mario Ramón Beteta fue defenestrado desde Los Pinos.

Como sea, el espectro de El redentor tropical sigue marcando ánimos, tiempos, agenda y discurso de sus oponentes.

Restan escasos 14 meses para que México y el mundo se enteren sobre quién ha resultado candidato triunfante en la elección presidencial. El futuro de la democracia, en tan corto plazo, es un enigma. Es cuanto.

Articulos relacionados

De aquelarres y otras historias

Redacción Voces del Periodista

“Es que están pasando por una fase de aprendizaje”

Ahora sí, o cabrestean o se ahorcan

Redacción Voces del Periodista