EL LECHO DE PROCUSTO Por: Abraham García Ibarra

De la colección de obras del erudito y filósofo de la Comunicación canadiense Marshall MacLuhan, pescamos la siguiente perla: El privilegio de los grandes, es no pensar.

Es una piedra sobre el tejado de varios sedicentes líderes de la Humanidad, revestidos con el rango de jefes de Estado o de gobierno. Pululan en territorios globalizados.

Y la cita obligada a Huarte de San Juan, autor de un libro único: Examen de Ingenios para las Ciencias: “No hay nada más perjudicial a la Republica que un necio con opinión de sabio, mayormente si tiene algún mando y gobierno”.

Para efecto de esta entrega, aquel es un disparo de escopeta cuata: Tenemos que los más sesudos críticos de Donald Trump atribuyen su agresiva extravagancia a su condición de narciso.

Dos Narcisos en lucha cuerpo a cuerpo

Entre los patriotas mexicanos que se han levantado en armas verborréicas contra el nuevo inquilino de la Casa Blanca y se exhiben como consejeros oficiosos de Enrique Peña Nieto, está Vicente Fox Quesada.

Narcisismo, dice el diagnóstico dado a conocer por la Sacra Rota Romana como conclusión de un estudio siquiátrico al ex presidente panista, cuando éste pidió la anulación de su matrimonio eclesiástico.

Uno y uno, ya son dos narcisos en el cuadrilátero, aunque el gringo ni se dar por enterado.

El asunto, es la gubernamental operación Masiosare, puesta en marcha contra el exótico e incontinente nacionalista norteamericano.

Los intelectuales orgánicos y otros “líderes de opinión” que desde México se han inscrito en la cruzada patriotera ofrecen a la galería su hallazgo: “Ha llegado un fascista a la Casa Blanca”. Lo nombran Adolfo Hitler. (Aplausos).

Nos recuerdan al profesor Juan de Mairena, criatura del genial Antonio Machado: “Huid de los novedosos y los noveleros de toda laya: De cada diez novedades que nos presentan, nueve son tonterías”.

El ascenso del Populismo de derechas

1960: En Nueva York, sale de prensas la obra El hombre político/ Las bases sociales de la política. De eso hace 57 años.

Su autor, Seymour Martin    Lipset hace un macizo estudio histórico sobre los agentes políticos que, desde la Independencia de los Estados Unidos, han participado en el proceso político.

Por supuesto, hace la relatoría del Partido Nazi en las diversas circunstancias de Europa y de los movimientos radicales que han  operado en el interior de los Estados Unidos en el contexto electoral.

Sólo nos detendremos en la advertencia del autor, de que en la sociedad norteamericana yacen larvarias las tendencias de un Populismo de derechas, que postula la supremacía blanca y cultiva el odio contra los negros, los judíos, etcétera,  y socialmente contra “los holgazanes” que viven de la asistencia pública, los homosexuales y otras variedades que, para ellos, son escoria. Editado el texto, repetimos, en 1960.

Lo que finalmente  llegó a la Casa Blanca, es el producto más acabado de aquel tipo de radicalismos. Sólo para los ciegos, todas las cosas son súbitas.

De Fox, ni su madre se lo creía

Volvamos al caso típico de Vicente Fox, quien identificaba a las mujeres como lavadora de dos patas.

En la presentación de un perfil político de Fox, editado en junio de 2000, un mes antes de la elección presidencial, el muralista guanajuatense, José Chávez Morado, se preguntó: ¿Qué es Fox? ¿Quién es Fox? “La respuesta, queridos amigos, es lamentablemente sencilla: Nada. Una nada llena de palabras. Por eso es capaz de decir algo un día para decir lo contrario al otro día”.

En la página 3 de aquel ensayo periodístico, aparece la siguiente frase: “No creo que sea Presidente, no lo visualizo que llegue, no creo”. La suscribió doña Mercedes Quesada de Fox.

Pero Fox también llegó. Es ahora uno de los paladines en defensa de la dignidad y la soberanía nacional.

Muchos comandantes, poca tropa

A la operación Masiosare le sobran  comandantes y le falta tropa.

En el Senado de la República (128 neoinsurgentes), cuyo frontispicio tiene la frase, La Patria es Primero (obviamente del independentista Vicente Guerrero), quien comanda la cruzada, es el priista Emilio Gamboa Patrón. No hace falta más dato; su biografía habla por él.

Ayer vimos a varios miembros del gabinete presidencial en reverencia y rindiéndole parte de su estrategia para enfrentar el huracán que viene del norte.

Otros cruzados se incorporaron a la campaña: Los socios de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago).

El comandante en jefe que arenga por la Unidad Nacional, es el tabasqueño Graco Ramírez Garrido Abreu. Habla como si ya hubiera hecho las paces con el Movimiento Amplio Morelense y con la comunidad universitaria, que exigen su desafuero. Con un Morelos “unido”, ¿cómo no va unirse la República?

El segundo en el mando, es el michoacano Silvano Aureoles Conejo. Ya tiene meses en Palacio. Michoacán es históricamente  la entidad mexicana con más expulsados hacia los Estados Unidos. En el organigrama del gobierno, existe una Secretaría del Migrante.

Hasta diciembre, el personal de esa dependencia sólo acreditó como acción la cobranza en la tesorería del estado. ¡Ah!, pero Silvano cultiva ambiciones de convertirse -como el tabasqueño Ramírez- en Presidente de la Republica, nominados por el impresentable Partido de la Revolución Mexicana (PRD).

De las lenguas de madera, puro aserrín

En la escena descrita, apareció otro aspirante a la sucesión de Peña Nieto: Su paisano y correligionario, el gobernador del Estado de México, Eruviel Ávila Villegas, presentado como presidente de la Comisión de Relaciones Internacionales del bloque de gobernadores; comisión que hasta el otoño pasado bostezaba en un profundo letargo.

Mientras Ávila Villegas hablaba y hablaba, en el estrado rondaban los fantasmas de las víctimas de feminicidios,  secuestros y linchamientos, categorías en la que el Estado de México gana, un día sí y otro también, medalla de carne.

De las lenguas de madera, sale a todas horas aserrín. En el llano sigue galopando implacable el México bronco, contra el cual prevenía juiciosamente el ex dirigente del PRI y ex secretario de Gobernación, don Jesús Reyes Heroles.

Masiosare puede dormir tranquilo. Aun dormido, sigue ganando las batallas. Pirro es su inspiración. Es cuanto.