Ello tomando como referencia la Convención sobre los Derechos del Niño (CDN), ratificada por México en 1990, y las Directrices de Naciones Unidas sobre las modalidades alternativas de cuidado de los niños, indicó la representación del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).
Consideró que es necesario que México cuente con un sistema nacional de registro de albergues y casas de cuidado, que entre otras cosas proporcione información actualizada sobre cuántos niños y niñas están institucionalizados y cuál es su situación.
También se requiere un sistema de supervisión de dichas instituciones, estándares de cuidado acordadas por las autoridades, la revisión regular y las razones por las que los menores privados de su medio familiar están en instituciones de cuidado, agregó.
Recordó que la Convención sobre los Derechos del Niño establece que todos los infantes tienen derecho a vivir en familia, que es el espacio primordial para su crecimiento, por lo que “incumbe a los padres o representantes legales la responsabilidad primaria de la crianza, protección y desarrollo del niño”.