Por Celeste Sáenz de Miera
- Nos han convertido en autómatas consumidores
- Recuperemos a la tiendita
- Los pequeños grandes comercios
Queridos amigos:
México transita casi huérfano de poderes formales que velen por el beneficio nacional.
Desde hace más de 30 años, se ha venido desmantelando la articulación de su riqueza, productividad y soberanía.
¡Así lo hemos permitido!
Devastados, nos han convertido en autómatas consumidores, programados para adquirir en donde nos dicten, aunque sea en contra de nuestra economía.
¿Qué nos pasa? ¡Tenemos la sartén por el mango! Solamente falta que lo asumamos y actuemos en consecuencia.
Nadie va a venir a rescatarnos de las garras del neoliberalismo rapaz, ¡si no somos NOSOTROS MISMOS!
Pensemos y tengamos la disciplina de adquirir a nuestro favor, haciendo un pequeño sacrificio a la comodidad de acudir a una tiendotota, en donde está todo concentrado y qué haciendo dumping, nos atrapa en contra de los propios intereses comunes.
Caminemos más, de paso; hagamos ejercicio y compremos en los pequeños grandes comercios que sostienen lo que queda de la economía nacional saludable… y que por cierto, pagan impuestos sin deducciones y costos de luz muy alejados de lo prometido, entre otras cosas.
Recuperemos a la tiendita de la esquina, a la tortillería que tan rico huele, a la tintorería de don Juan, a la carniceria de a la vuelta… a las recauderías ¡con olor a campo y fruta fresca!
El que paga, dicen que manda. ¡Entonces, paguemos a nuestro favor y amor por este México nuestro!
Tenemos la sartén por el mango. ¡Actuemos en consecuencia!