MÉXICO, (Sputnik), 8 de febrero de 2021 .- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, da su primera rueda de prensa tras superar el coronavirus. El mandatario, de 67 años, superó un tipo de COVID-19 ligero.
La secretaria de Gobernación, Olga Sánchez Cordero, ya había prometido que López Obrador volvería a las conferencias de prensa matutinas el 8 de febrero si los médicos se lo permitían. Mientras estaba enfermo, Sánchez Cordero se puso al frente de las conferencias —o mañaneras, como se conocen—, que tienen lugar a las 7 de la mañana.
“Quiero agradecer a todos los mexicanos, mujeres y hombres, que se preocuparon por mi enfermedad, por mi contagio de COVID-19, afortunadamente salí adelante”, dijo el mandatario en su primera conferencia de prensa después de haber dado positivo a la prueba clínica para detectar el coronavirus SARS CoV-2.
El presidente mexicano anunció el 4 de febrero que había dado negativo en una prueba rápida preliminar luego de que el 24 de enero se confirmara que se había contagiado.
Por su parte, el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, aseguró que el presidente estaba “prácticamente asintomático”. Los únicos síntomas fueron fiebre y un ligero dolor de cabeza.
Tratamiento con antivirales
El tratamiento que recibió el presidente fue a base de “antivirales y desinflamatorios”, que se aplica a pacientes de esa infección respiratoria en un programa de especialistas del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición, que es un hospital de investigación.
Las dolencias padecidas en su convalecencia “fueron dolores de cuerpo y afortunadamente poca temperatura”, detalló el jefe del Ejecutivo, que añadió que fue “saliendo” a medida que le aplicaron el tratamiento.
“Como decía José Martí [prócer de la independencia cubana]: ‘amor con amor se paga’, estamos de nuevo de pie y en lucha”, prosiguió.
López Obrador dio “gracias al Creador, a la naturaleza y la ciencia”, al expresar su solidaridad con las miles de personas que han sufrido la pérdida de familiares y a los pacientes “que sufren daños en el proceso de recuperación de esta terrible enfermedad”.
El presidente detalló que esperará su turno que le corresponda para recibir alguna de las vacunas contra COVID-19 que el Gobierno ha contratado con varias firmas farmacéuticas.
La siguiente fase será la vacunación de unos 15 millones de adultos mayores en los próximos meses.
López Obrador recordó los planes para adquirir la vacuna Sputnik V, producida por el Centro Gamaleya de Moscú, gracias al acuerdo firmado con el Gobierno ruso, que encabeza el presidente Vladímir Putin, con quien habló un día después de anunciar su contagio.
“Vamos a tener vacunas suficientes de las que están produciendo en Rusia, lo mismo hicimos con el Gobierno de China, con el compromiso de utilización de sus vacunas”, Casino y Sinovac, reseñó.
Además indicó que la vacuna de la farmacéutica británica AstraZeneca ya se envasa en México, tras recibir los primeros lotes de la sustancia activa, que se produce en Argentina.
Transformación
En el plano político, expresó que continúan los esfuerzos de su Administración para impulsar un proceso de transformación política y social.
En su conferencia presentó la actualización semanal de obras estratégicas, dos ferrocarriles, un aeropuerto y una refinería, que “están avanzando bien y creando muchos empleos, ahora que se requieren empleos y reactivar la economía nacional”.
En México han fallecido 166.200 personas por COVID-19, según el reporte oficial diario presentado la noche del domingo 7 de febrero.