El fundador de Amazon, Jeff Bezos, acompañado de tres personas ha regresado exitosamente a la Tierra tras lanzarse en un vuelo suborbital a bordo del New Shepard, un cohete fabricado por su compañía espacial Blue Origin.
El primer vuelo tripulado de la nave New Shepard despegó del Launch Site One de Blue Origin, situado al oeste de Texas (EE.UU.). Tres minutos más tarde, la cápsula RSS First Step se separó del cohete y continuó el vuelo hasta alcanzar una altura de más de 100 kilómetros sobre la superficie terrestre, unos siete minutos después de despegar, donde se experimentó la ingravidez.
La cápsula luego descendió hacia la Tierra y aterrizó en el desierto de Texas mediante el uso de paracaídas.
El cohete reutilizable de la misión también aterrizó exitosamente. Tras llevar la cápsula al espacio, el vehículo utilizó motores de freno, aletas y propulsores de aterrizaje para regresar a la Tierra.
Los tripulantes
Bezos, que soñaba con viajar al espacio desde que era niño, realizó el vuelo acompañado por tres personas a bordo del vehículo suborbital que tiene capacidad para seis tripulantes. Entre los integrantes de la misión, se encuentra su hermano menor, Mark Bezos, de 53 años.
Además, el vuelo incluyó a la piloto pionera Wally Funk, de 82 años, que se ha convertido en la persona de más edad en volar al espacio. Funk formó parte del legendario grupo Mercury 13, formado por mujeres, que participó en los ensayos de la NASA en los albores de la era espacial, si bien ninguna de ellas llegó a volar, porque las primeras misiones estaban compuestas solo por hombres.
Por último, formó parte de la tripulación el neerlandés Oliver Daemen, de 18 años. El estudiante ocupó el asiento de un comprador anónimo que pagó 28 millones de dólares por el viaje turístico espacial, pero que tuvo que posponerlo por “conflictos de horario”. Ahora que se ha completado la misión, Daemen es la persona más joven en experimentar la ingravidez.
Una era comercial
El del New Shepard es el segundo vuelo suborbital de un multimillonario en apenas diez días. El pasado 11 de julio, el empresario Richard Branson alcanzó una altitud de 85 kilómetros a bordo de su avión Unity de Virgin Galactic.
Tras la misión exitosa de Blue Origin, las acciones de Virgin Galactic han experimentado un descenso del 4%.
La empresa de Bezos planea proceder a la comercialización de su programa, enviando al espacio a voluntarios que se decidan a contemplar la Tierra desde otra perspectiva. En cuanto al precio del billete, no ha precisado ninguna suma concreta, aunque se estima que su costo ascenderá a unos cientos de miles de dólares.