El mercado de la reventa de boletos para el Super Bowl LI se vino abajo minutos después de la derrota de los Vaqueros de Dallas ante los Empacadores de Green Bay.
Antes del juego de Ronda Divisional, el boleto más barato en StubHub para el juego por el título de la NFL en Houston estaba a $4,195. Poco después de que Dallas cayó 34-31 con un gol de campo cuando el reloj expiró, el precio cayó 20 por ciento a $3,349.
Los revendedores ya se habían beneficiado con la posibilidad de que los Cowboys llegaran a su primer Super Bowl en 21 años y cerca de su hogar, en Houston.
“La emoción de que los Cowboys jugaran un Super Bowl a cuatro horas de distancia en auto de su estadio provocó que los precios se elevaran a niveles sin precedentes”, dijo Patrick Ryan, cofundador de Eventellect, una compañía de distribución de boletos con base en Houston.
La compañía es la única que vende boletos para el Super Bowl a estas alturas del año con la posibilidad de que los aficionados elijan específicamente su asiento, en vez de comprar entradas para zonas en gradas para las cuales los revendedores aún no tienen asientos asignados.
