CHINA, (Sputnik), 10 de enero de 2021 .- El Consejo de Estado de China ha aprobado nuevas normas para proteger a las empresas de sanciones extranjeras. Se les podría prohibir cumplir con los requisitos de los Gobiernos extranjeros si las autoridades chinas consideran que las restricciones son ilegales.
Los ciudadanos chinos, las entidades jurídicas y otras organizaciones ahora tienen la obligación de informar al Consejo de Estado en un plazo de 30 días si encuentran medidas restrictivas o prohibitivas extranjeras que interfieran en las actividades económicas o comerciales.
Un comité del Consejo de Estado debe examinar las restricciones y puede considerarlas una “aplicación extraterritorial impropia” de las leyes extranjeras. Al determinar la legalidad de las sanciones, el Consejo de Estado debe considerar si las restricciones violan el derecho internacional y afectan a la soberanía, la seguridad y los intereses de China. En este caso, las autoridades pueden prohibir el reconocimiento, la ejecución y el cumplimiento de esas sanciones.
Además, el Consejo de Estado puede levantar temporalmente esta prohibición, previa solicitud, y así permitir que sus empresas cumplan con el requisito del Gobierno extranjero.
Si una entidad se ajusta a las sanciones por sí misma sin autorización y bajo la prohibición, los ciudadanos y entidades chinos pueden pedirle una indemnización a través de los tribunales, y las autoridades pueden emitir una advertencia o una multa.
Los nuevos requisitos, especialmente en términos de compensación, exponen potencialmente a los inversores extranjeros a graves responsabilidades en uno de sus mayores mercados, escribió Financial Times.
Las nuevas normas podrían dejar “a las empresas extranjeras, especialmente las estadounidenses, en China en un verdadero aprieto” si se aplican estrictamente, cree Bert Hofman, director del Instituto de Asia Oriental en Singapur, citado por FT.
El periódico señaló que China trata principalmente de contrarrestar las sanciones de EEUU, que fueron iniciadas por el presidente Donald Trump.
El nuevo decreto establece el derecho del Gobierno chino a tomar represalias contra las sanciones, pero no especifica de qué tipo. Además, las nuevas normas no se aplican a las medidas y restricciones previstas en los tratados y acuerdos internacionales que China ya ha suscrito.
“Las nuevas reglas y la lista de entidades no confiables es más un ladrido que una mordida”, cree Angela Zhang, directora del Centro de Derecho de China de la Universidad de Hong Kong.
“China entiende claramente el costo de la imposición de contramedidas, lo que también explica por qué se tardó tanto en adoptar estas normas”, dijo a FT.