ESTADOS UNIDOS, (RT), 4 de septiembre de 2019 .- El canciller Bruno Rodríguez afirma que el Departamento de Estado ejerce mayores presiones contra seis países latinoamericanos.
El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, denunció este lunes que EE.UU. ha desplegado una serie de acciones de presión a países latinoamericanos para obtener votos contra el bloqueo a la isla en la Organización de la Naciones Unidas (ONU), previsto en Nueva York para la próxima semana.
Cada año Cuba presenta un proyecto de resolución ante la ONU para condenar el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto unilateralmente por Washington a la isla.
A través de Twitter, Rodríguez denunció que el Departamento de Estado de EE.UU. ejerce presión en particular contra seis países latinoamericanos, con el objetivo de forzarlos a cambiar su tradicional voto a favor de la resolución.
La votación en la Asamblea General sobre la resolución en contra de las sanciones estadounidenses contra Cuba se ejerce anualmente desde el año 1992 entre los 193 países miembro, con histórico respaldo de la comunidad internacional a La Habana.
#Cuba cuenta en su lucha vs el bloqueo con el apoyo unánime de los pueblos latinoamericanos y del mundo y espera q ningún gbno se someta a los dictámenes de Washington, dando la espalda a la voluntad de sus pueblos, a la opinión pública, al Derecho Intl., a la ética y la justicia
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) November 4, 2019
Desde la llegada al poder de Donald Trump han crecido los roces entre el Gobierno cubano y el estadounidense, a diferencia de la política de acercamiento a La Habana que había intentado aplicar la Administración de Barack Obama.
Desde la asunción de Trump al poder, en 2017, el Gobierno cubano advirtió sobre la “retórica hostil” del presidente estadounidense, que justificó el retroceso en la política sobre Cuba señalando supuestas violaciones a los derechos humanos y “falta de libertad” en la isla.
EE.UU. introdujo formalmente el embargo comercial completo contra Cuba el 3 de febrero 1962 a través de un decreto del presidente John F. Kennedy, aunque, de hecho, el bloqueo comenzó casi inmediatamente después de la victoria de la Revolución Cubana el 1 de enero de 1959 contra el régimen dictatorial de Fulgencio Batista.
Las sanciones incluían una serie de prohibiciones tales como la exportación e importación de mercancías procedentes de EE.UU.; el comercio con subsidiarias de compañías estadounidenses en terceros países; la visita de los turistas estadounidenses a la isla. También se impidió el uso del dólar para las transacciones financieras con otros países y se bloqueó el acceso a territorio de EE.UU. de los buques y aviones cubanos.
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