Ahora resulta, que el método propagandístico de moda, consiste en que los hacedores de las noticias falsas, conocidas también como fake news, acusan a quienes denuncian sus mentiras, o sea, culpan al otro de lo mismo que ellos hacen y así, se victimizan y al victimizarse, se vacunan contra cualquier responsabilidad y sospecha que se tenga de ellos, que son precisamente quienes desde hace años han fabricado y financiado al terrorismo. Sólo como un ejemplo, recordemos que hace unas semanas, el Parlamento Europeo, denominó de “propaganda rusa, que se debe bloquear”, a la información sobre una realidad que por años procuraron esconder quienes han fabricado y financiado a mercenarios como una especie de ejército alterno en el contexto de las guerras híbridas.
Según la definición de Retórica victimista, se trata de una “técnica demagógica” que se utiliza para conseguir poder político y que consiste en lograr incidir en emociones, como el miedo, el terror, o también a los prejuicios, convencionalismos, tabúes y también en deseos y esperanza, del público para así, ganar el apoyo popular, mediante el uso de propaganda política, consistente en descalificar al adversario mostrándolo como atacante, en lugar de refutar y argumentar puntos de vista. Para ello el sujeto adopta el rol de víctima dentro del contexto de la discusión, de tal forma que el otro interlocutor queda posicionado implícitamente frente a terceros como un impostor autoritario y su argumentación, como mera imposición o ataque. En ocasiones se realiza junto con la retórica del punto medio, o retórica centrista, que es una técnica demagógica consistente en descalificar al adversario mostrándolo como extremista en lugar de refutar y argumentar sus afirmaciones. Para ello, el victimista, se camufla como si fuera el conciliador, que afirma apoyar un supuesto punto medio dentro del contexto de la discusión para lograr así, que el otro interlocutor quede posicionado como un extremista.
Con éste mecanismo, sus argumentos son difícilmente refutables, pues cualquier contraargumentación queda transformada en prueba de la “omnipotencia o sutileza de los ofensores”. Por el contrario, cualquier ataque que realice, por falaz e insidioso que sea, queda envuelto en un manto de candidez ya que supuestamente se está defendiendo. De acuerdo a especialistas, la utilización de la retórica victimista, se relaciona estrechamente con la megalomanía.
Recientemente l@s retóric@s victimistas, se pronunciaron a favor de un “nuevo sistema” en internet, para contrarrestar las “fake news” o noticias falsas, mismas de las que ell@s son artífices. Pongamos como ejemplo a
la oportuna y ahora famosa pizzagate… qué tal vez ellos mismos encargaron a domicilio!!!
Vaya vaya, lo que nos ha tocado vivir…y que debemos hacer como ciudadanos víctimas del retorcido engaño? Pues aprender a reconocer y defender la verdad de los hechos, tras la cortina inmunda de la retórica victimista de los señores de la guerra!
Celeste Sáenz de Miera y Aguiar.