CIUDAD DE MÉXICO, (RT), 23 de noviembre de 2017.- Casi 7.000 personas viven en banquetas, parques y debajo de puentes en la Ciudad de México. Expuestas a drogas muy baratas y dañinas, violencia extrema y a caer en redes de explotación sexual, trata y tráfico de órganos, muy pocas logran sobrevivir más de siete años luego de que comienzan a pernoctar y deambular en las calles de la capital de la República Mexicana.
Hombres, mujeres, ancianos y niños. Algunos se quedaron sin hogar desde los primeros años de vida; otros, ya en la etapa de la senectud. Sus familias se desintegraron o fueron expulsados de ellas. Unos prefirieron la violencia, el hambre y el frío de las calles, al terror de una casa con violencia intrafamiliar. Otros ni siquiera pudieron elegir: fueron echados o simplemente un día se encontraron sin techo, sin recursos y abandonados.
La tercera generación que vive en la calle
Hoy, con 23 años de edad, Edwin Alberto vive intoxicado. Inhala el solvente químico PVC, conocido entre la población callejera de la Ciudad de México como “la mona”. Una lata, de la que se obtienen 40 dosis, cuesta alrededor de un dólar. El activo inhibe la sensación de hambre y frío. Pero lo asequible de la droga es proporcional a los daños que infringe al cuerpo humano. La inhalación de este solvente provoca la deshidratación del cerebro y rápidamente afecta la coordinación motriz, los pulmones, la vista y el hígado.
Edwin se quedó sin familia cuando todos sus integrantes tomaron rumbos distintos. Se encontró solo hace más de una década. Contaba entonces con 12 años de edad. Hoy padece dificultad para hablar pero no abandona sus sueños: “Me gustaría aprender a cocinar y viajar por el mundo”.
Le teme a los policías. Sabe que los uniformados de cualquier tipo no están para proteger a los callejeros como él. Por el contrario, tiene que huir de ellos: “La policía es la que más nos maltrata”.
El Instituto de Asistencia e Integración Social (Iasis) es la dependencia oficial del Gobierno de la Ciudad de México encargada de atender a las poblaciones callejeras. Encabezado por un abogado, el maestro en derecho civil Héctor Maldonado San Germán, el instituto promovió la expedición del Protocolo Interinstitucional de Atención Integral a Personas en Riesgo de Vivir en Calle e Integrantes de las Poblaciones Callejeras en la Ciudad de México.
El documento, de observancia obligatoria para todos los servidores públicos de esta entidad federativa, se propone “favorecer el reconocimiento, respeto, protección, promoción, goce y ejercicio de los derechos humanos de las personas en riesgo de vivir en calle e integrantes de las poblaciones callejeras […], bajo los principios de igualdad y no discriminación”.