Tomar una buena foto es captar adecuadamente el contraste de la luz, es esculpir con las diversas tonalidades y gradaciones de grises y de colores para plasmarlas en una superficie. Si a ello le sumamos el interés periodístico, el trabajo hacia temas de interés utilizando la técnica fotográfica, podemos encontrar resultados muy atractivos e interesantes.
De esto se trata la exposición que alumnos del Centro de Estudios Universitarios PART inauguraron en el Salón Inglés del Club de Periodistas de México, en una noche de convivencia y armonía.
Los jóvenes conjugaron la visión de su entorno en la exposición ‘Lvx Scriptvram’, o Escritura de luz, una recopilación de 24 fotoperiodistas en formación de la mencionada escuela, quienes utilizaron la fotografía para plasmar temas de la vida cotidiana a través de su visión y su lente.
“Podemos poner muchos fotógrafos en un mismo sitio, y siempre sacarán fotos muy diferentes, porque necesariamente proceden de sitios muy, muy diferentes. Cada uno tiene su manera de ver, cada uno en función de su historia”, ha dicho Sebastiao Salgado en su magnífico documental “La sal de la tierra”, un homenaje a su persona y a su obra.
Y eso se evidencia en el trabajo de estos muchachos, que durante cuatro meses abordaron temas de su interés para dar a conocer problemáticas sociales y asuntos de la vida cotidiana con una visión objetiva y diferente a lo plasmado en los medios de comunicación tradicional.
La muestra aborda muchos escenarios de lo cotidiano, que a muchos escapan y que otros viven permanentemente: las montañas de basura del Bordo de Xochiaca, la fiesta taurina, el trabajo en los rastros de carne, protestas por el gasolinazo, la llamada ‘tercera edad’, y muchos otros tópicos.
El muestreo colectivo aborda los siguientes títulos, con sus respectivos autores:
‘Viajes de esperanza’, de Braulio Emmanuel Colín Martínez; ‘Movilidad en la Ciudad de México, de Brian Sebastián Almanza Gutiérrez; ‘Flamenco rosa’, de Luis Ernesto López Velázquez; ‘Dios, por favor nunca me abandones’, de Kevin Salazar Merino; ‘Derecho a una vida digna’, de Daniela Berenice Barajas Ronquillo; ‘La pacífica niñez’, de Alondra Álvarez Medina; ‘Carnaval de colores en Chimalhuacán’, de Enrique Secundino Santiago; ‘Teléfono celular, nuevo modo de convivir’, de Tadeo Alvarado; ‘Música emergente en México’, de Jesús Ramón Blanco Cruz; ‘La carne roja en México’, de Michell Montero; ‘Formas arquitectónicas’, de Apolonia Megan Dakota Tirado Domínguez, y ‘Grito por la lucha’, de Griselda Montserrat Garduño Martínez.
También está el trabajo titulado ‘Las mujeres perdidas’, de Ana Isabel Pérez Sánchez; ‘Las ninfas del Coloso’, de Dante U. Varela; ‘La pobreza en México’, de Joseph Loyola García; ‘Abandono social’, de Susano Matías Brenda Victoria; ‘Metzonalli, Luz de Luna’, de Fernanda López Ávila; ‘¡Que el balón ruede para todos!’, de Stefanni Alejandra Hernández Ramírez; ‘Camino a la virgen’, de Jorge Eduardo Esqueda; ‘México, destinado a la vejez’, de Daniela Aylin Flores Jiménez; ‘Danza prehispánica, tradición que perdura’, de Andrea Jiménez Ávila; ‘Parches, luces y metales’, de Alejandro Fernández; ‘El Bordo como modo de vida’, de Fernanda Barajas González, y ‘México prehispánico’, de Yael Martín Hernández Vannegas.
Cada tema fotográfico se acompañó con un texto descriptivo de la escena plasmada, una explicación del porqué de esas imágenes.
Una muestra interesante, diversos enfoques, variados temas, mirada joven al entorno, nuevas miradas a la problemática.
Por Martín Carlos Estrada