MÉXICO, (RT), 24 de mayo de 2019 .- Los nombres de 36 comunicadores acaparan la atención luego que un periódico nacional los publicara, a pesar de que el Gobierno afirmó que no los divulgaría.
La Presidencia de México enlistó a 36 periodistas, y sus empresas, por haber recibido contratos durante el Gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018) por un monto total de casi 1.082 millones de pesos (56 millones de dólares ), por concepto de publicidad y gastos de comunicación entre los años 2013 y 2018.
El actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, había indicado el pasado 8 de mayo pasado que contaba con la información de los periodistas que “cobraban por sus servicios en el Gobierno”, pero que no la daría a conocer por considerarlo inadecuado.
“No doy a conocer los datos porque no lo considero sano (…) Se gastaba muchísimo dinero en el ‘maiceo‘, en el ‘chayote‘”, dijo López Obrador aquel día, en alusión a periodista Raymundo Riva Palacio, quien había publicado una columna en la que señalaba que Alfonso Romo, jefe de la Oficina Presidencial, había presentado su renuncia el 2 de mayo.
El mandatario latinoamericano afirmó que el rumor de la supuesta dimisión del funcionario se trataba de un invento de los que antes cobraban por sus servicios en el Gobierno: “Les pagaban a los columnistas, los que ahora están dale y dale y dale con este asunto, y que incluso inventan cosas como lo de la renuncia de Romo; cobraban por sus servicios en el Gobierno (…) Entonces, se terminó eso, están molestos y ahora tienen financiamiento de otras partes y tienen seguramente la consigna de estar en contra nuestra”.
La víspera, López Obrador informó que había entregado al Instituto de Transparencia el reporte de los periodistas que presuntamente recibían dinero del Gobierno. “No vamos a dar a conocer nombres”, agregó. Sin embargo, el documento fue publicado en exclusiva por el diario Reforma y retomado por diversos informativos locales.
Al respecto, el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) informó que no publicó dicha información, bajo el recurso de revisión RRA 2076/19, pues aún debe ser verificada, para lo cual cuenta con un plazo de cinco días.
“En caso de que se considere que cumplió lo solicitado por el Pleno, de acuerdo con la solicitud de información, se archivará el expediente y se publicará la información proporcionada por el Sujeto Obligado en la Plataforma Nacional de Transparencia”, se lee en un comunicado.
Los primeros en la lista
Según la lista, el periodista Joaquín López-Dóriga fue quien recibió más dinero, un poco más de 251.000.000 de pesos (13.175.868 de dólares), por medio de las empresas Ankla Comunicación, Astron Publicidad, Plataforma Digital Joaquín López-Dóriga y Premium Digital Group.
Sobre los señalamientos, el comunicador aseguró que “nunca” ha recibido “un peso del Gobierno”.
Le sigue Federico Arreola, cuya empresa, Periódico Digital Sendero, presuntamente obtuvo alrededor de 153.000.000 de pesos (8.031.505 de dólares), de los cuales 151.000.000 eran por publicidad y 1.680.600 por concepto de otros servicios, sin especificar cuáles.
Arreola contestó a través de una columna, donde escribe que su “único pecado” es ser periodista y emprendedor, y alega que la cifra dada a conocer solo representa el 3 % del gasto en publicidad oficial.
“De un total aproximado de 30.000 millones de pesos que el Gobierno de Enrique Peña Nieto gastó o invirtió en publicidad en medios de comunicación, tu gobierno dio a conocer el destino de nada más 1.000 millones de pesos, esto es, apenas el 3%… El único pecado que cometimos quienes fuimos exhibidos —es mi caso y el de Enrique Krauze, al menos— es el de ser ‘periodistas‘ además de emprendedores“, escribió.
El historiador Enrique Krauze, de la editorial Clío y la revista Letras Libres, figura en el tercer sitio del presunto financiamiento, con un monto de 144.000.000 de pesos (7.559.064 de dólares).
El intelectual mexicano calificó la lista de un ataque a la libertad de expresión y una “muestra evidente de intolerancia, persecución y mala fe“.