En un operativo que incluyó el cateo para detectar armas y drogas, se trasladó a 38 reclusos de alta peligrosidad que estaban en el Penal de Topo Chico hacia distintas cárceles federales del país.
Se desplegaron 1,200 elementos –que incluyeron agentes federales y estatales- para el traslado de los internos, con el fin de garantizar que no haya ningún incidente, según informó el vocero de Seguridad Estatal en Nuevo León, Aldo Fasci Zuazua.
Los reos se distribuyeron hacia penales federales de los estados de Michoacán, Veracruz, Durango, Oaxaca y Guanajuato. Se dio a conocer que todos los trasladados pertenecen a distintos cárteles del crimen organizado. La medida tiene como objetivo eliminar el autogobierno en el interior de ese y otros centros penitenciarios de Nuevo León.
Se recuerda que han sido trasladados más de 100 reos desde el mes de febrero de 2016, fecha en que la violencia ocurrida en Topo Chico causó 49 reclusos muertos.
Registran disturbios
Luego de que fueran trasladados los 38 reos desde el penal de Topo Chico hacia otras cárceles, se reportaron disturbios, como la quema de colchones y lo que algunas personas identificaron como disparos.
Los reos se habían agrupado y generaron una situación de caos. El incendio de los colchones causó una serie de columnas de humo que se percibían desde distintos puntos del exterior.
Fuentes de gobierno no han reportado muertos o heridos.
(Portada: Foto de César Cepeda @cesarmty en Twitter)