México escaló 10 posiciones en el estudio del Foro Económico Mundial sobre tecnologías de la información. El punto negativo está en los detalles: el nivel de educación de los usuarios reduce el ímpetu de las TIC como generadoras de economía.
El ajuste a la baja en los precios de los servicios de telecomunicaciones móviles permitieron a México escalar 10 posiciones en el ranking global de Tecnologías de la Información 2015 del Foro Económico Mundial (WEF, por su sigla en inglés), al situarse en la posición 69 de 143 economías desde la posición 79 que ostentó el año pasado.
“La mejora de México en el ranking es ampliamente atribuible a la revisión de las tarifas de telefonía móvil, lo que causa que el país avance 89 lugares en el pilar de asequibilidad, en el que ahora está en el lugar 4. Los desafíos en otras áreas aún son considerables”, explica el reporte del WEF difundido este martes.
La disminución de las tarifas es consecuencia del nuevo marco regulatorio en las telecomunicaciones, con resultados tangibles en el bolsillo del consumidor mexicano. En telefonía móvil, los precios se redujeron 16.7% entre febrero del 2013 y enero del 2015; 4.6% fue la reducción en telefonía fija y 0.8% en Internet. El cobro de la larga distancia nacional desapareció, mientras que la larga distancia internacional cayó 40.3% en sus tarifas, según el regulador.
Pese a esta mejoría, México aún no se recupera del desplome del 2014 cuando cayó 16 lugares desde la posición 63 que ostentó en el 2013. Por el contrario, en el comparativo del 2015, el país registra un descenso en tres de los cuatro subíndices que el WEF mide en su reporte anual.
Sólo el Subíndice de Preparación (que mide infraestructura, asequibilidad y habilidades TIC) registró un ascenso al sitio 58 en el 2015 desde el 94 del 2014. Aquí destaca el pilar de asequibilidad, que repuntó a la cuarta posición desde el lugar 93 alcanzado en el 2014.
El Subíndice de Entorno para el Desarrollo de las TIC (que mide política y regulación, así como innovación en los negocios) cayó del lugar 75 en 2014 hasta el 81 en 2015. El Subíndice de Uso (que mide la adopción a nivel individual, en negocios y en gobiernos) se desplomó hasta el sitio 79 desde el 71 que tenía el año anterior.
“La pobre calidad tanto en el ambiente de innovación y negocios como en el marco regulatorio es especialmente problemático (…) La capacidad del país para apalancar las TIC está limitada por el nivel de educación de la población, lo que se traduce en un nada halagador lugar 92 en el pilar de habilidades de la población, convirtiéndose en el pilar de México peor posicionado en el ranking”, explicó el WEF.
Mientras que el Subíndice de Impacto de las TIC (medido en la parte económica como social) bajó de la posición 59 en el 2014 hasta la 72 en el 2015. El comportamiento de este subíndice es un reflejo del mal posicionamiento del país en la preparación de capital humano y capacidad de innovación de los negocios.
“Hay pocos indicios de que las TIC están teniendo impactos significativos en la economía o en la sociedad, tal como se refleja en la débil capacidad de innovación de los negocios en México y la pequeña parte de la fuerza laboral del país empleado en actividades intensivas relacionadas con el conocimiento”, aseguró el reporte.
Este descalabro en los subíndices ocurre a pesar de que, en noviembre del 2013, el gobierno federal anunció la Estrategia Digital Nacional (EDN), que coordina Alejandra Lagunes, con el fin de fortalecer en México un ecosistema basado en las tecnologías de la información como impulsoras del crecimiento y el desarrollo.
En el anuncio del año pasado, Lagunes planteó la meta de que al término el periodo del actual gobierno, en noviembre del 2018, México ostente el primer lugar en conectividad en América Latina, desde el quinto actual, y escalar posiciones en los indicadores de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Pero en el ranking del WEF, México aún dista de convertirse en el líder regional al situarse en la séptima posición de los países de América Latina, superado por Chile (38), Barbados (39), Uruguay (46), Costa Rica (49), Panamá (51) y Colombia (64).
“Seguimos rankeados en lo general muy mal, quitando el caso de los precios (asequibilidad). Seguimos mal, y no es por satanizar al país, no es objetivo de vernos mal, sino que hemos carecido en competencia, hemos carecido en inversiones suficientes y por eso estamos rezagados”, opinó Ernesto Piedras, director general de la firma de análisis The Competitive Intelligence Unit (The CIU).
“Es de celebrar que en el caso de los precios, las condiciones operativas hayan mejorado tanto, pero un solo eslabón no mejora toda la cadena”, dijo Piedras, en entrevista telefónica.
Para Piedras, existen tres factores cruciales que repercuten en la posición a media tabla de México en el estudio del Foro Económico Mundial: tecnología, mercado y regulación. Y es precisamente en este último eslabón donde el trabajo se acumula.
En el marco regulatorio, que ayudó a mejorar las tarifas de los servicios de telecomunicaciones, aún quedan tareas en el mercado de la televisión y otros sectores. En particular en TV de paga, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) analiza nuevas medidas de regulación para mejorar precios y cobertura, pues el segmento aumentó 2.5% sus tarifas y una sola empresa mantiene más de la mitad del mercado (Grupo Televisa). Ahora mismo el regulador también se encuentra diseñando una nueva política de licitación de espectro para servicios móviles a partir del 2018, que vendría a abaratar a aún más los costos y a aumentar la penetración de las nuevas tecnologías.
“Debemos concretar la reforma (de telecomunicaciones). Vemos que se nos siguen tropezando acciones. La licitación de cadenas de TV se nos tropezó y habría que revisar las razones del por qué. La portabilidad númerica no entró en el plazo estipulado y eso también se nos tropezó otra vez. Tenemos que seguir este manual de conectividad nacional que llamamos reforma, nueva ley y Estrategia Digital Nacional, para asegurar que estos servicios lleguen por la vía de mercado o con alianzas público-privadas o ejercicios gubernamentales pero a todos los mexicanos”, dijo Piedras.
Con información de El Economista