Decenas de miles personas participaron en Madrid en la marcha convocada por Podemos que partió de la Plaza de Cibeles y desembocó en una abarrotada Puerta del Sol.
La manifestación concentró a personas de todas las edades y condiciones, quienes avanzaron tras una gran pancarta morada que anunciaba el cambio: “Es ahora”.
“Sí se puede”, “El Pueblo unido jamás será vencido”, y “Que no, que no, que no nos representan” fueron las consignas más coreadas entre grandes mantas en las que se podía leer: “Políticos, el pueblo ha despertado”, o “Renta básica universal”.
Entre las banderas que ondeaban los manifestantes, destacaban algunas del partido griego de izquierdas Syriza, hermano de Podemos, que ganó recientemente las elecciones en el país helénico, junto a enseñas moradas del partido y otras republicanas.
Algunos de los congregados en la Puerta del Sol recibieron a Pablo Iglesias al grito de ¡Presidente! ¡Presidente!, poco antes de que el líder de Podemos se dirigiera a la multitud desde una gran tarima.
“Este año vamos a trabajar para que el cambio político llegue, este año es el año del cambio y vamos a ganar las elecciones al Partido Popular (PP)”, dijo eufórico el dirigente de Podemos en referencia a los comicios presidenciales que se celebrarán previsiblemente a finales de 2015.
“El viento del cambio comienza a soplar en Europa”, agregó Iglesias en referencia a la reciente victoria de Syriza en Grecia, luego de enfatizar la necesidad de lanzar en España un plan de rescate ciudadano para los perjudicados por la crisis.
Con la multitudinaria manifestación, Podemos quiso hacer una demostración de fuerza de cara a las elecciones generales de 2015 y en las que buscará desbancar del poder al derechista PP, al que está en condiciones de ganar, según señalan las encuestas.
La nueva formación considera al PP y al otro gran partido socialista español (PSOE), como parte de la casta política que gobierna en España para sí misma.
Con información de Reforma