Al menos 70 personas perdieron la vida hoy en un ataque perpetrado contra una mezquita sunita por una milicia musulmana armada, en un poblado de la provincia de Diyala, en el este de Irak, informaron oficiales de seguridad.
El ataque ocurrió durante las oraciones del viernes en la mezquita Musab bin Omair en el pueblo de Imam Wais, a unos 120 kilómetros al noreste de la capital Bagdad, en momentos en que el recinto se encontraba lleno de fieles.
De acuerdo con los primeros reportes, un atacante suicida entró al santuario y detonó los explosivos que llevaba consigo, mientras que desde el exterior hombres armados abrieron fuego contra las personas que salían tratando de escapar.
Fuentes médicas informaron que heridos y muertos están siendo trasladados al hospital de la ciudad de Baquba, capital provincial, y precisaron que se han contabilizado al menos 46 cuerpos.
Sin embargo, la cifra mortal fue actualizada más tarde por arriba de los 70, de acuerdo con reportes de la cadena de noticias Al Yazira.
Hasta el momento se desconoce con precisión cuál fue el grupo que llevó a cabo el ataque, pero en el área se registran fuertes y frecuentes enfrentamientos entre las tropas iraquíes, respaldadas por milicias chiitas, con extremistas sunitas.
Además, combatientes del grupo fundamentalista Estado Islámico en Irak y el Levante (EIIL) han intentado convencer a miembros de dos prominentes tribus sunitas locales -Oal-Waisi y al-Jabur- para que se unan a ellos, pero estos se han negado.
Las autoridades locales estiman que la agresión contra los fieles sunitas habría sido en represalia por un reciente ataque con bomba en una carretera por la que aspirantes se dirigían a un evento de reclutamiento organizado por una milicia chiita.
El ataque de este viernes tuvo lugar en medio de la disputa entre el Ejército de Irak y los combatientes del EIIL por el control del norte y del este del territorio iraquí, donde los islamistas armados pretenden crear un califato.
Militantes del EIIL y sus aliados sunitas emprendieron una extensa campaña armada para tomar el control de Irak en febrero pasado y, aunque han logrado hacerse de varias áreas, las fuerzas de seguridad iraquíes han frenado su avance hacia Bagdad.
Las localidades de Jalula y al-Saadiyah, también en Diyala, cayeron recientemente en manos de los militantes islámicos, pero Imam Wais aún está bajo control gubernamental.
Se trata de la peor crisis que enfrenta la nación árabe, cuya violencia ha obligado a por lo menos 1.2 millones de iraquíes a abandonar sus hogares en busca de refugio.