El Premio Alemán de Periodismo Walter Reuter 2015 quedó abierto a partir del 13 de mayo, con la temática “Política de drogas: desafíos y nuevas perspectivas”. El Premio Alemán de Periodismo es un galardón dirigido a periodistas mexicanos y latinoamericanos que publican en medios de divulgación en las postulaciones deben haber sido publicadas entre octubre de 2014 y el 1 de octubre del 2015 en México, aseguró esta mañana en el Club de Periodistas de México, Alexa Pauls, quien informó que en medios mexicanos o extranjeros de lengua española divulgados en México.
Puntualizó que el eje temático de esta novela edición es: “Política de drogas: desafíos y nuevas perspectivas”. En México, abundó, encontramos todos los eslabones de la cadena de la economía ilícita de drogas: la producción, el tráfico y el consumo. El desafío consiste en encontrar políticas de drogas que minimicen los daños causados tanto por los estupefacientes como por las políticas de prohibición y regulatorias.
Abundó la coordinadora del importante evento que los medios de comunicación tienen un papel fundamental en la generación de espacios para el debate informativo y plural sobre las consecuencias del consumo y tráfico de drogas, tanto para la población como para sus gobiernos.
Por su parte, Hans Mathieu, director de la Fundación Friedrich Ebert, manifestó que es un esfuerzo en el que, por primera vez en la historia, nueve instituciones alemanas con intereses y trabajos muy distintos, se unen para fomentar la libertad de expresión y otorgar un reconocimiento a la actividad periodística de calidad en México. Las instituciones convocantes son: Embajada de la República Federal de Alemania en México, Fundación Friedrich Ebert, Fundación Friedrich Naumann, Fundación Heinrich Böll, Fundación Konrad Adenauer, Fundación Rosa Luxemburg, Goethe-Institut Mexiko y la Cámara Mexicano-Alemana.
El jurado estará integrado por la periodista Carmen Aristegui, Juan Villoro, Patricia Münch, María Teresa Juárez, Beatriz Solís, Lucia Lugone, Marta Durán de Huerta, Gerardo Yong, Luis Astorga y Claudio Herrera Pahl
Manifestó que el Premio Alemán de Periodismo lleva el nombre de Walter Reuter en reconocimiento póstumo a este gran pionero del periodismo gráfico moderno. Reuter nació en Alemania en 1906. Documentó el auge del régimen nazi con el lente de su cámara, actividad que lo obligó a dejar su patria en 1933. Tras participar como foto-reportero en la Guerra Civil española, tuvo que huir nuevamente de las fuerzas en poder y llegó a México como refugiado político en 1942.
En tierras mexicanas encontró una nueva patria y la paz necesaria para seguir desarrollando un trabajo extraordinario como fotógrafo y cineasta. Falleció en Cuernavaca a la edad de 99 años, tras una vida llena de aventura y productividad. Con el nombre del Premio las instituciones convocantes quieren recordar el trabajo de Walter Reuter y brindar su más amplio reconocimiento al importante papel que jugó México en la política internacional, recibiendo a muchos demócratas y antifascistas de Europa en los años 30 y 40 del siglo pasado.
Alexa Pauls, destacó que el uso de drogas se remonta a los tiempos más remotos de la humanidad, sin embargo, de acuerdo con organizaciones y especialistas, en los últimos cien años la oferta y la demanda de drogas han crecido de manera exponencial, lo cual ha llevado a que los Estados en el mundo promuevan políticas regulatorias, en las cuales domina un enfoque prohibicionista y punitivo.
El surgimiento de una economía ilícita constituye una amenaza para la seguridad y el bienestar de varios países no solo de América Latina.
En México se manifiestan todos los eslabones de la cadena de la economía ilícita de drogas.
–Consumo, producción y tráfico-. De acuerdo con un informe de la Comisión de Estupefacientes de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), en el año 2012 se registraron 1,278 casos en México en los que el uso de drogas ilícitas fue identificado como la principal causa de muerte. Tampoco se pueden pasar por alto las miles de muertes a raíz del combate contra el narcotráfico. El sistema penal y los centros penitenciarios tampoco se han escapado de sus efectos. Los costos son evidentes para la sociedad y la economía, y se manifiestan en la violencia e inseguridad que sufre todo el país.
Acompañada de Stefan Jost, director de la Fundación Konrad Adenauer; Annette Von Shoenfeld, directora de la Fundación Heinrich Boell; Hans Mathieu, director de la Fundación Friedrich Ebert; Christoph Breunig; de asuntos de prensa de Alemania y Marta Durán de Huerta, socióloga y periodista, aseguró que “el gran reto para los gobiernos es atender esta situación desde un enfoque integral que considere los derechos humanos como fundamentales, para que las políticas y medidas que se impulsen garanticen el bienestar y seguridad de las personas”.
La corrupción y la impunidad dentro de los aparatos estatales, así como diversos factores sociales, económicos y geográficos en este conflicto dificultan la búsqueda de soluciones. El desafío consiste en encontrar políticas que minimicen los daños causados tanto por las drogas como por las políticas de prohibición y regulatorias.
En el debate existen al menos dos tendencias: un enfoque que opina que la prohibición de drogas es necesaria para la protección de la salud pública y evita males mayores, en particular para los grupos más vulnerables de la población; otro enfoque que sostiene que no se puede comprobar que la despenalización resulta en un aumento de consumo, y que busca romper con estigmas y criminalización de las personas usuarias de drogas.
Destacó que los cambios legislativos en varios países de las Américas –como Estados Unidos y Uruguay- ensayan la distribución controlada de algunas drogas dentro de un marco jurídico bien definido, aunque muchos expertos dudan que una liberalización parcial tenga un efecto positivo en cuanto al mejoramiento de la situación de seguridad.
Los medios de comunicación, agregó, tienen un papel fundamental en la generación y apertura de espacios para el debate informativo y plural sobre las consecuencias del uso y tráfico de drogas para los Estados y la población en su conjunto. También se han convertido en espacios, cada vez más necesarios, para reconocer alternativas políticas de drogas con el objetivo de encontrar soluciones en el ámbito de la seguridad y la salud pública del país.
Es por ello que este año convocamos a periodistas que desarrollan su labor en México a postular sus trabajos al Premio Alemán de Periodismo Walter Reuter en la temática de: Política de drogas: desafíos y nuevas perspectivas.
Serán valorados los trabajos que traten las consecuencias del tráfico de drogas ya sea para: el Estado y la situación política del país; la seguridad y el sistema jurídico; la economía y la sociedad en México y que aborden un debate sobre las políticas públicas, posibles alternativas y nuevas perspectivas, concluyó.
Gerardo Bono González