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El impacto de la visita de Trump a México y la renuncia de Videgaray

Su paso dejó huellas. Tras reunirse con el presidente Enrique Peña Nieto, el candidato republicano a la presidencia deEstados Unidos, Donald Trump, sembró varias polémicas y más descontentos. Fueron muchos los mexicanos que protestaron por la llegada del millonario, que tiene planes inmigratorios ofensivos contra los latinoamericanos; además, el encuentro provocó el rechazo de Hillary Clinton, la candidata demócrata, quien tras conocer que el republicano había viajado se negó a visitar el país.
Y no fue sólo eso. El gobierno de Enrique Peña Nieto no salió ileso. Aparte de protagonizar un pequeño escándalo por las idas y vueltas respecto a la idea que tiene el magnate de construir un muro en la frontera para evitar el ingreso indiscriminado de mexicanos y reducir a su entender así la delincuencia (Trump dice que el muro lo pagará México; Peña Nieto dice que no; el millonario asegura que así será; el mexicano dice que hablaron del tema y que dijo que su gobierno no pondrá un dólar; Trump asegura que Peña Nieto rompió los códigos del encuentro), ahora renunció el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, hombre de confianza del presidente, señalado como el responsable de haber llevado al republicano al país.
En un mensaje oficial, Peña Nieto indicó que “el secretario de Hacienda me ha presentado su renuncia y yo lo he aceptado. Ha sido un funcionario comprometido con México y con este presidente”, de acuerdo a una nota publicada por el diario El Mundo.
En reemplazo de Videgaray asumirá el hasta ahora secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade. El encargo que deberá afrontar, según Peña Nieto, es claro: “Debe conseguir este año superávit en las cuentas públicas” y un importante ajuste del gasto que “debe afectar al Gobierno pero no a las familias. No se subirán los impuestos ni habrá nuevos impuestos”.
No vincular la salida de Videgaray del gobierno con la visita del aspirante a convertirse en el sucesor de Barack Obama a Los Pinos, sede del gobierno mexicano, resulta trabajoso. Fueron muchos los ciudadanos que consideraron el encuentro como un acto de traición a la patria.
Un periódico mexicano –Reforma- aseguró que fue idea de Videgaray que Trump visitara México, inspirado por las rebajas de las calificaciones internacionales de deuda y bancos mexicanos por la amenaza de una posible presidencia de Trump. Su idea era que en encuentro bilateral calmara a los mercados.
De hecho, funcionarios del gobierno mexicano hasta aseguran que la reunión se concretó incluso sin el conocimiento de la Secretaría de Relaciones Exteriores y de los responsables de la oficina de América del Norte.
Las consecuencias parecen no haber sido para nada buenas. Aparte del alejamiento de una de las manos derechas de Peña Nieto, el pueblo mexicano convocó a una marcha el 15 de septiembre para exigir su renuncia.
 
(Nota de News Max)

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