Policías municipales del municipio Medellín de Bravo, Veracruz, fueron detenidos este lunes para ser investigados por el secuestro del periodista Moisés Sánchez, quien fue llevado de su casa el viernes por hombres armados, informó la Procuraduría General de Justicia del estado. Veracruz es el estado más peligroso para ejercer el periodismo en México, con al menos 15 comunicadores asesinados y otros cuatro desaparecidos desde el año 2000, según datos de la ONG con sede en Londres.
“Como parte de las investigaciones por la desaparición de Moisés Sánchez Cerezo, policías municipales de Medellín fueron retenidos, sujetos a investigación, en los primeros minutos de este día”, dijo la dependencia en un comunicado.
La PGJDF que no precisó cuántos uniformados fueron detenidos, señaló que su declaración enriquecerá las investigaciones sobre el secuestro del comunicador, quien continúa desaparecido.
El viernes pasado, un grupo de hombres armados irrumpió en el domicilio de Sánchez en el municipio de Medellín de Bravo -a unos 400 km de la capital mexicana-, y lo sacó con violencia llevándose además su cámara y teléfono celular.
Sánchez es director y editor del periódico “La Unión”, un medio crítico de Medellín de Bravo que reporta, entre otros temas, los hechos de violencia derivados del narcotráfico en este municipio, uno de los puertos más dinámicos del país.
El “periodismo y activismo” de Sánchez había provocado el enojo del alcalde del pueblo, ya que tres días antes de su secuestro el periodista supo a través de “una fuente confiable” que el edil “pretendía callarlo dándole una lección”, denunció la organización de defensa de periodistas Artículo 19.
Este estado es también uno de los más afectados por la violencia generada por los cárteles del narcotráfico que, además de infiltrar las instituciones, se disputan el territorio y negocios alternos como el robo de combustible a la paraestatal Petróleos Mexicanos y el cobro de extorsiones a migrantes que intentan llegar a Estados Unidos.
México encabeza la lista de los países más riesgosos para el ejercicio periodístico en América Latina, con 81 periodistas asesinados entre enero de 2000 y septiembre de 2014, de acuerdo con estadísticas de Reporteros Sin Fronteras.
Con información de Notimex