Voces del Periodista Diario

Contra la Patria nunca tendremos la razón

La Piedra en el Zapato

Por Abraham García Ibarra

Ay, el cambio climático: Los niños y los viejos mexicanos mueren ya no sólo a golpes de plomo, sino a golpes de calor. Ya no tenemos una primavera o un verano ardientes. Para el infelizaje, todo el año es ardiente.

Hierve la economía, hierve la política, arde la diplomacia: Si no hay paz en las calles ni en las plazas públicas, menos puede haberla en las conciencias.

Cada quien, dice la conseja popular, habla de la feria según le vaya en ella. Por nuestra parte, no somos de los que se aferran a aquello de que todo tiempo pasado fue mejor. Sabemos, sí, que, en la historia de México, ha habido insignes compatriotas que hicieron mejor las cosas.

Momento de destino frente a la acechanza imperial

Desde ahora mismo, en el calendario próximo tenemos un 2020 que definirá un periodo crítico en las relaciones bilaterales con los Estados Unidos.

En el interior, sabremos dentro de un año que agrupaciones lograron franquicia para convertirse en partidos políticos nacionales con la mira puesta en la pugna por 14 gubernaturas de los estados y las elecciones intermedias para renovar la LXIV Legislatura federal en 2021. Es la pugna por el poder, por el poder mismo.

En 2021, otro proceso político en las urnas, en las que el conductor de la cuarta transformación, Andrés Manuel López Obrador expondrá a escrutinio popular su permanencia en el poder presidencial.

La propuesta original sugirió la concurrencia de la votación en las elecciones de junio de 2021. Objetada la fecha, se puso a consideración la previa del 21 de marzo, aniversario del natalicio de Benito Juárez.

Iniciativa 2021: Año de la reconciliación con España

Pero López Obrador tiene en agenda para 2021 otra iniciativa alterna: Declarar el Año de la reconciliación con España, ocasión para la que el mandatario ha emplazado al reino pedir perdón por los atropellos sufridos por los pueblos originarios durante la Conquista. El rey de España, Felipe VI se ha puesto remolón ante el respetuoso pedido.

¿Perdón sólo por los agravios de hace cinco siglos? ¿No los hubo durante el movimiento de Insurgencia y aún después de reconocida la Declaración de Independencia de México?

El 17 de julio de 1861, la Presidencia de Juárez promulgó la Ley de Suspensión de Pagos. España, Inglaterra y Francia tramaron la Triple Alianza armada contra México en reclamo de deudas definitivamente leoninas y monstruosas.

Cinco meses después, el 18 de diciembre, Juárez lanzó un manifiesto a la Nación, a saber:

Nuestra dignidad nacional se halla ofendida…

Los anuncios de la próxima guerra que se preparaba en Europa contra nosotros, han comenzado por desgracia a realizarse: Fuerzas españolas han invadido nuestro territorio: Nuestra dignidad nacional se halla ofendida y en peligro tal vez nuestra Independencia.

“… el gobernador del Estado de Veracruz ha recibido una intimación del Comandante de las fuerzas navales españolas para desocupar aquella plaza y la fortaleza de Ulúa, que el propio comandante anuncia conservar como prenda, hasta que el Gobierno de la Reina de España se asegure de que en lo futuro será tratada la Nación española con la consideración que le es debida y de que serán religiosamente observados los pactos que se celebren entre ambos Gobiernos.

Habla Juárez de que, hasta aquel momento, reclamaciones de la Legación española han sido escuchadas: Con mucha anterioridad de nuestra independencia, el Congreso hizo nacional la deuda contraída por el Gobierno español, aunque gran parte del monto se había empleado en combatir nuestra misma independencia y otra parte no menos considerable se había destinado a los compromisos europeos del Monarca español.

Los hombres somos nada; los principios son el todo

Para 1862 la triple invasión está en marcha. En mayo de 1863, Juárez convoca: ¡Mexicanos! Juremos por los héroes muertos defendiendo los muros de Zaragoza; juremos por los que aún existen vencedores allí mientras pudieron pelear, que combatiremos sin descanso y sin reserva de sacrificios contra el ejército que está profanando la Patria de Hidalgo y de Morelos, de Zaragoza y González Ortega

Causalmente el 21 de marzo de 1863, aniversario de su natalicio, Juárez pronunció un brindis: Dar la vida por la independencia es recibir un gran bien, darla cuando se ve un hombre obligado por el ejemplo de tantos mexicanos dignos, apenas sería llenar un deber; sin afectación de modestia, sin que quede en el fondo de mi copa un sentimiento hipócrita, repito que los hombres somos nada, que los principios son el todo.

“Que, más grande nuestra causa que todos los tiranos y su poder y sus ejércitos, triunfará en breve y que México renovará el testimonio espléndido que ofreció al mundo el 16 de septiembre de 1810, mostrándose digno del triunfo de su sagrada autonomía”.

Juárez restauró la República bajo la convicción de que, contra la Patria, nunca tendremos la razón. El 18 de julio próximo se cumplen 147 años de que El Benemérito murió en Palacio Nacional: Esta es nuestra oración de julio. Es cuanto.

Articulos relacionados

Obras son amores y no buenos discursos

Redacción Voces del Periodista

Opinión: Ricardo Anaya, un muerto viviente

Análisis: Tierra y Agua, no Aviones en el antiguo lago de Texcoco

Redacción Voces del Periodista