Voces del Periodista Diario

De cómo la amnesia ataca a políticos bellacos

La Piedra en el Zapato

Por Abraham García Ibarra

Cuando hay reglas del juego universales, aceptadas voluntariamente por los beligerantes, el que se lleva se aguanta, según lo dictan la democracia “representativa” y la norma electoral que establece la alternancia en el poder político.

Pongámosle piso a ese supuesto: En el verano de 1988, en la pugna por los paquetes de la elección presidencial, la bancada del Partido Acción Nacional (PAN) armó un piquete civil para enfrentar a la partida militar, tratando de secuestrar la documentación, resguardada en los estacionamientos del Palacio Legislativo de San Lázaro.

En el invierno de 1989, en el mismo recinto legislativo vimos como chivo en cristalería al diputado por el PAN, Vicente Fox, tomando por asalto la tribuna para reventar la comparecencia de los secretarios de Hacienda y Crédito Público y de Programación y Presupuesto, citados para ilustrar a los legisladores sobre los Criterios de Política Económica para 1990. Estamos observando una fotografía de la trifulca.

El chantaje como forma de lograr transas electorales

En 1997, en nombre del presidente Ernesto Zedillo, el secretario de Gobernación entregó al Congreso de la Unión su iniciativa de Reforma Política con modificaciones a la Constitución y revisión de leyes secundarias en materia electoral.

Siendo jefe nacional del PAN Felipe Calderón Hinojosa, las bancadas parlamentarias azules pretendieron sabotear el proyecto en plan de chantaje al Presidente, exigiendo entonces concertacesiones poselectorales en el estado de Puebla.

Dos años después, el propio PAN reventó la iniciativa de Zedillo para abrir el sector eléctrico al capital extranjero. Desde Guanajuato, Fox acusó al Presidente de ordenar apagones en el Distrito Federal para presionar en favor de su iniciativa.

El decretazo de 2002 y la asignación de 3 mil millones de pesos

En 2002, ya estando en Los Pinos, el panista Fox dictó por sus pistolas el decretazo para liberar a las cadenas de televisión del compromiso de abonar impuestos con tiempo aire para el Estado, al mismo tiempo que estaban en disputa 3 mil millones de pesos para Comunicación Social, cediéndose la rebanada más jugosa al duopolio televisivo.

Dos años después, el Senado de la República consultaba una reforma a la Ley de Radio y Televisión que pretendía abogar por las audiencias. Desde Los Pinos se dio golpe Legislativo para que se aprobara la Ley Televisa, que fue recurrida ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación por un grupo de senadores. Los ministros declararon inconstitucionales algunas de las cláusulas del ordenamiento.

Las elecciones de 2006 y el haiga sido como haiga sido

En 2006, conocida la sentencia del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que nombró Presidente al candidato del PAN, Felipe Calderón Hinojosa, el michoacano declaró orondo que ocupaba Los Pinos, haiga sido como haiga sido.

En diciembre del mismo año, pasando sobre el artículo 29 de la Constitución General de la República, el panista Calderón Hinojosa declaró su guerra contra el crimen organizado, que al tiempo rompió el tejido social.

El caso Odebrecht y los sobornos a funcionarios de Pemex

Para 2010, las autoridades mexicanas tenían conocimiento del escándalo de la corruptora brasileña Odebrecht. Aquí, la filial de ese corporativo, Braskim era sospechosa de sobornos por más de 10 millones de dólares a funcionarios de Pemex. Calderón y el PAN hicieron mutis a las evidencias como catedral.

Entre las legislaturas LXII y LXIII federales, diputados del PAN fueron pillados con las manos en los moches a costa de gobiernos municipales, incluso de su propio partido.

En el marco de las campañas presidenciales de 2018, el candidato azul, Ricardo Anaya Cortés, fue señalado por la PGR como presunto responsable de fraude maquinado con bienes inmobiliarios. El PAN salió colérico en su defensa. En fin…

Ahora, el Partido Acción Nacional (PAN) pretende resurgir de sus cenizas como cruzado de la legalidad. Los de la brega de eternidad suelen refugiarse en la amnesia. Es cuanto.

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