Por Gerardo Castilleja
Director de club de periodistas mexicanos promueve conferencia del Instituto Schiller 13 de septiembre de 2022 (EIRNS)—
La secretaria general del Club de Periodistas Mexicanos (CPM), Celeste Sáenz, envió cuatro tuits el lunes, cada uno con un enlace a un panel diferente de la conferencia del Instituto Schiller del fin de semana pasado, “Inspirando a la humanidad para sobrevivir a la mayor crisis del mundo”. Historia.” Tiene más de 21 000 seguidores, y la imagen de Lyndon LaRouche está al frente y al centro como el gráfico en cada tuit.
El CPM es una institución asociada a la corriente nacionalista del país desde su formación en 1952.
Su fundador —Antonio Sáenz de Miera, padre de Celeste— fue un periodista bastante célebre que, entre otras cosas, se desempeñó como asesor de prensa del presidente José López Portillo, quien después de reunirse en privado con Lyndon LaRouche en mayo de 1982, autorizó a su personal a organizar una conferencia de prensa para LaRouche en su residencia y oficina presidencial, Los Pinos.
La conferencia de prensa estuvo repleta y LaRouche hizo un llamado a Iberoamérica a unirse para lanzar “la bomba de la deuda” para defender a Argentina del primer despliegue fuera del área de la OTAN, conocido como la Guerra de las Malvinas. La sede de CPM es un hermoso edificio antiguo mexicano, otorgado por el presidente López Mateos (también presidente nacionalista) en la década de 1960.
Los gobiernos mexicanos de la década de 1990, es decir, los regímenes neoliberales de Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, intentaron reprimir al CPM robándole su antigua sede colonial. El entonces presidente del CPM, Antonio Sáenz de Miera, Celeste Sáenz y el actual Director Ejecutivo del CPM, Mouris Salloum George, lograron derrotar este intento de aplastamiento de la institución.
El CPM escribe en el historial de su sitio web que, si bien perdieron muchos miembros en esa lucha, la institución “salió fortalecida” de ella. Los dos miembros vivos del equipo que optó por luchar en lugar de someterse a la tiranía de los gobiernos neoliberales traidores todavía están a cargo. Cuán lícito es que las redes que se remontan a la lucha de López Portillo por el desarrollo de México ahora ayuden a que la voz de LaRouche se escuche nuevamente en México.