Voces del Periodista Diario

¿Qué destino prefiere el capital extranjero?

VOCES OPINIÓN Por: Mouris Salloum George

 

El discurso electorero todo lo enreda,  lo confunde y se da el caso de que provoca conflictos diplomáticos.

Venezuela pasa por una crisis política interna por la falta de entendimiento entre el régimen y las fuerzas opositoras. La manzana de la discordia en estos días es la convocatoria a una Asamblea Constituyente, que ha exacerbado más los ánimos de los beligerantes.

México ha pasado por la aciaga experiencia electoral del 4 de junio, cuyos resultados han detonado la pugna por la sucesión presidencial de 2018.

Cada nación tiene derecho a su autodeterminación y la voluntad de sus ciudadanos, lo dice la ONU, debe privar sobre toda injerencia extranjera.

Ochoa Reza: Los mexicanos no quieren ser Venezuela

La noche del 4 de junio, el dirigente nacional del PRI, Enrique Ochoa Reza, convertido en juez electoral, dictaminó que los electores en aquellas jornadas en cuatro estados de la República, votaron “para no ser como Venezuela”.

No se sabe con qué metodología sociológica el presidente del PRI llegó a esa conclusión.

Es posible que los árbitros electorales, tanto estatales como federales, sobre todo el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJD), desentrañen aquel acertijo.

Con independencia de lo que venga para ambas repúblicas en el corto plazo, podemos aventurar algunas consideraciones.

Se resuelva como se resuelva en Venezuela la crisis política, ese país tiene potencial para remontar su actual crisis económica y social.

Según el más reciente informe de la OPEP, Venezuela cuenta con más de 300 mil millones de barriles de crudo. Equivalen al 24.8 por ciento de las reservas mundiales, a un plazo de 300 años.

De acuerdo con un análisis de hace tres semanas, del corporativo Forbes, México cuenta sólo con reservas por cinco mil 900 millones de crudo a un plazo de 8.1 años; al finalizar 2014, el alcance de esas reservas era para 9.6 años.

Algo está haciendo la diferencia: El reporte sobre la balanza de pagos al primer trimestre de 2017 indica que en ese periodo México captó únicamente dos mil 15 millones de nuevas inversiones extranjeras.

Como moscas sobre la miel venezolana

A finales de la semana pasada, The New York Times International publicó este apunte: “Los bonos venezolanos parecen ser un blanco poco probable para los inversionistas extranjeros. El país está al borde de la revuelta y apenas tiene suficiente dinero para alimentar a la gente”.

Sin embargo… “los bonos emitidos por la estatal Petróleos de Venezuela han atraído a algunos de los inversionistas más sofisticados del mundo”.

Documenta la publicación ese anuncio con la información de que la operadora estadunidense Goldman Sachs decidió comprar un paquete de bonos de la petrolera venezolana por dos mil 800 millones de dólares con vencimiento a 2022.

En una sola tirada, esa operación supera con 800 millones de dólares la inversión extranjera nueva, captada por México en todo el primer trimestre de 2017.

La publicación neoyorkina dice más: Los corporativos que operan desde Londres en los mercados emergentes: JP Morgan Chase, BlackRock, T. Rowe Price, Fidelity y Ashmore, están en la lista de los ávidos inversionistas interesados en los bonos de la petrolera venezolana.

Lo que impulsa la apuesta, escribe Landon Thomas Jr., autor de ese reporte, es la opinión de que “las economías emergentes ya no están dispuestas a enfrentar la ira de los inversionistas en bonos al caer en incumplimiento de sus deudas”.

Obviamente, esa es la seguridad en que sustentan su criterio los inversionistas que están cayendo como moscas a la miel venezolana.

Una muletilla que se escucha con frecuencia en México sobre determinadas acciones de gobierno controvertidas por la oposición es: No politicen el tema.

Los inversionistas extranjeros no son hermanas de la caridad: No politizan sus planes. Los someten a la prueba y el error con base en la Ciencia Económica. Si sienten que van a la segura, por algo será.

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Redacción Voces del Periodista