Voces del Periodista Diario

Para leer a sedicentes líderes de opinión

Sinfonía Telúrica

Por Abraham García Ibarra

La ventaja de hacer prensa marginal es que, sólo por excepción, algún distraído lector le hace a uno sugerencias. Las asumimos por nuestra cuenta para recrear algunos temas.

Cuando, en 1988, se le dio al PRI golpe de Estado técnico (diputado tricolor constitucionalista don Antonio Martínez Báez dixit) y el gobierno de la usurpación acometió las contrarreformas constitucionales, la pretendida justificación fue: Hay que acabar con el régimen de simulación.

Se iniciaba el primer sexenio neoliberal de los tecnócratas made in USA y entonces supimos que sus planes tenían como soporte ejercicios de simulación a cargo de programadores expertos en informática que, a su vez, partían de un cálculo de probabilidades.

Siguiendo por ese sendero, llegó el momento en que conectamos con un paisano, con título de actuario, ocupado en una agencia encuestadora, entonces reputada de confiable. No cualquiera.

La técnica de las encuestas sobre intención del voto

Consultado sobre la metodología de investigación de mercados aplicada a la intención del voto, nos dio dos pistas: 1) La revisión de las tendencias electorales de uno y hasta tres procesos previos y sus resultados, según el tipo de elección, y 2) Ejercicios de simulación digital para tener un mínimo de aproximación a futuros resultados probables.

(Después verificamos que esos productos se afeitan según el contratante de esos estudios demoscópicos y el valor de la facturación del servicio.)

Cuando esa actividad cobró auge, aparecieron como hongos en verano encuestadoras patito, no pocas con domicilios falsos y sin registro en el Instituto Federal Electoral, ahora INE.

Existe una asociación nacional de esas empresas. De su padrón, por    conocimiento directo, le damos credibilidad a dos que tres despachos. Si vale la confesión, creemos en Roy Campos.

Llegaron los resultados de abril y los mariachis callaron

A principios de abril, un concentrado nacional de varias encuestadoras le dio al inquilino de Palacio Nacional un techo de 60 puntos porcentuales en el índice de aprobación. Seguimos la lectura de algunos líderes de opinión.

Un pool de esos opinantes sacó la siguiente conclusión: El tabasqueño no pasará ileso la consulta popular en 2021. Otro bloque diagnosticó: Morena no tiene nada que hacer en 2021: La cuarta transformación es debut y despedida.

A media semana, con la misma atención que ponemos en Hugo López-Gattel, nos ancló en pantallas y páginas impresas un informador. Apuntamos su nombre: Alejandro Moreno. Como nos pareciera homónimo del campechano priista, buscamos su hoja de vida: Profesor del Departamento de Ciencia Política de ITAM y director de Encuestas y Estudios de Opinión de El Financiero.

Nos quedamos con un dato de su reporte sobre la encuesta de abril: El apoyo ciudadano a AML0 subió de 60 a 68 por ciento en el periodo encuestado. Si mal no calculamos, la subida fue de casi 13 por ciento.

Los que hace un mes dieron por muerto al tabasqueño y tocaron el réquiem por la cuarta transformación todavía no nos dan su dictamen sobre los resultados de dicho estudio, que tiene un dato de no poca monta: Los que contestan que la crisis del coronavirus les está perjudicando subieron de 59 a 81 por ciento. Es cuanto. 

Articulos relacionados

Salinas en activo ¿por el susto?

Las inútiles búsquedas de Diógenes El cínico

EL LECHO DE PROCUSTO Por: Abraham García Ibarra

La importancia de las alianzas

Editor Web