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Terremotos: ¿El corrupto nace o se hace?

Voces del Director

Desde Filomeno Mata 8

Por Mouris Salloum George (*)

Dudas existenciales: ¿El corrupto nace, o se hace? En la correa de la corrupción, ¿qué fue primero, el huevo o la gallina? ¿El funcionario responsable de un trámite administrativo que exige moche, o el particular que lo tienta con el cohecho para tener expedita la respuesta a su gestión? ¿O al revés?

Como no existe aún el Fiscal Anticorrupción, las preguntas tendrían que remitirse a la doctora Arely Gómez, titular de la Secretaría de la Función Pública.

Quién sabe si se nos conteste que es información reservada. Esto es, protegida a piedra y lodo. Mucho lodo.

El doctor Mancera promete actuar

Ayer, se cuestionaba en esta misma edición sobre el desconocimiento de instrucciones a los agentes del Ministerio Público para que abran causas penales a los presuntos responsables de las consecuencias sociales y materiales de los terremotos del 19 de septiembre.

A esas horas, no se sabía que el jefe del Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera había girado órdenes a la Procuraduría General de Justicia de la entidad para que inicie investigaciones sobre presuntas transgresiones a la normatividad por parte de los constructores de complejos habitacionales o empresariales que se colapsaron al impacto de los terremotos.

De ser así, se indagarían específicamente 38 casos edificaciones siniestradas. “De haber responsabilidades, se actuará en consecuencia”, prometió Mancera.

¿Por qué el gobierno de la Ciudad esperó a que se presentara la tragedia de septiembre para actuar en consecuencia?

Desde que se inició la administración del Distrito Federal en 2012, se ha perdido la cuenta de los expedientes de denuncia de propietarios e inquilinos en contra de compañías constructoras y corredoras de bienes raíces por incumplimiento de la normatividad en la materia y de los contratos de compra venta, que entrañaban un inminente riesgo para la seguridad de los ocupantes de esos inmuebles-ataúdes.

Se perdió la cuenta de los expedientes y los expedientes mismos se perdieron en la noche de los tiempos burocráticos.

Benito Juárez, un caso paradigmático

Tomemos como un caso-piloto el de la Delegación Benito Juárez, de la Ciudad de México. La demarcación,  con José Espina Von Roehrich (2000) hasta Christian Damian Von Roehrich De la Isla (2017), ha sido administrada por gobiernos emanados del Partido Acción Nacional (PAN).

En 2008, se celebró el centenario de la emblemática Colonia del Valle en esa delegación. Los herederos de las familias fundadoras plantearon entonces ante la autoridad delegacional un pliego petitorio en el que denunciaron verdaderos actos mafiosos para obligar a los propietarios a vender sus viejas casas a los promotores de “desarrollos residenciales”.

Acusaron la anarquía en la ubicación y diseño de esos complejos habitacionales verticales de dudosa calidad y seguridad; los problemas de suministro, sobre todo, de agua; el caos en las vialidades.

Incluso, el robo de espacios públicos para reservar calles privadas sólo para que los nuevos avecindados puedan usarlas como estacionamientos vehiculares, etcétera.

En  2017 mismo, se multiplicaron las protestas públicas frente a la sede administrativa de la Delegación por el incesante cambio de uso de suelo, la indiscriminada expedición de licencias de construcción y el disimulo de las instancias de Protección Civil ante las advertencias vecinales sobre peligro que significaban las obras por escasa o nula supervisión de las autoridades competentes.

Voces en el desierto. Se instituyó el ni los veo ni los oigo.

Un macabro recuento periodístico

En recientes horas, periodistas del grupo El Financiero-Blomberg, que hicieron un recorrido in situ sobre las zonas más devastadas de la Delegación, reportaron que al menos seis edificios con menos de una década de existencia –incluso algunos de ellos sólo con meses-, yacen hoy afectados en su integridad estructural

Acompañan esos reportajes testimonios de algunos compradores defraudados. A Francisco Zarazúa su habitación le costó tres millones de pesos. La empresa vendedora le prometió un edificio nuevo, diseñado con lo último de la tecnología, resistente, ecológico y autosustentable, con paneles solares gigantes en el techo

Entre las ruinas de los edificios desplomados quedaron cadáveres de sus habitantes. El reportaje comentado nombra a los corporativos que levantaron y negociaron esos adefesios.

Según esa agencia, 17 por ciento de los edificios declarados inhabitables en Benito Juárez, son nuevos o de muy reciente construcción.

Es la fotografía, son los testimonios de las víctimas que se repiten en otras delegaciones de la Ciudad de México.

“Si hay responsabilidades, se actuará en consecuencia”. ¿Dónde y cuántas veces hemos escuchado eso?

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