Es triste reconocer que la mayor tragedia en la historia de la humanidad en términos de duración y niveles de barbarismo se esconde tras un silencio que refleja una culpabilidad que se prefiere ocultar, éste tiene que ver con la extracción de unos 50 millones de africanos para venderlos como esclavos, advirtió el jefe de la Sección de la Historia y Memoria para el Diálogo de la Unesco, Ali Moussa Yé.
“Es lamentable también que sean las naciones desarrolladas, aquellas que se beneficiaron con este crimen en la que prevalezca la discriminación, la xenofobia y la exclusión social de los afrodescendientes”, dijo al participar en la reunión internacional del comité científico La Ruta del Esclavo: Resistencia, Libertad y Patrimonio, que tiene lugar en el alcázar de Chapultepec.
Previamente Ricardo Sepúlveda, director general de Política Pública en Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, destacó que en una sociedad plenamente democrática como a la que aspira México ningún grupo o persona puede ser más importante que otro, e hizo un llamado para que la aplicación de los derechos humanos se haga más efectiva.
En tanto, Ricardo Bucio, presidente del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, dijo que el próximo año se llevará a cabo el primer censo para contabilizar de manera precisa a las comunidades de afrodescendientes en México.