La democracia, la corrupción, la distribución injusta de la riqueza y los beneficios que otorga el poder fueron algunos de los temas que abordaron Carmen Aristegui, Denisse Dresser y Lorenzo Meyer la tarde del domingo en la edición XV de la Feria Internacional del Libro de Zócalo.
En el Foro Eduardo Galeano retumbaron los vítores a Aristegui por su labor informativa. El caso Ayotzinapa de los jóvenes normalistas desaparecidos, la corrupción y la frustración de la sociedad asociada a la carga inmensa de impunidad fueron los ejes sobre los que convergieron los tres participantes en esta mesa organizada por la Brigada Para leer en libertad.
“Este México es muy similar al que teníamos en 2012, no veo ningún cambio sustantivo. Hay dos grandes temas uno es el de la desigualdad y el de la inequidad, porque la sociedad mexicana sigue siendo tan inequitativa ahora como era hace seis o 10 años”, explicó Meyer.
Además “esta sociedad se ha caracterizado por la pésima distribución, tanto del poder como de los beneficios que ofrece”.
El segundo tema, prosiguió Meyer, “es el de la corrupción, que también forma parte de la estructura política Mexicana y que se encuentra en el centro de la lucha por el poder”.
Carmen Aristegui, por su parte, expresó que “los miedos tienen que cambiar de bando”.
“Tenemos que reinventarnos como sociedad en ánimo de que se pueden hacer las cosas diferente, porque tenemos grandes pendientes que versan sobre la insatisfacción social; sobre lo que debería ser la democracia”, señaló.
Esta jornada dominical la feria se desarrolló con diversas actividades, que incluyeron el concierto de Monocordio y la presentación de los libros La raíz nazi del PAN de Rafael Barajas El fisgón y del libro Madera, movimiento agrario y guerrilla en Chihuahua de Jesús Vargas, el cual fue presentado por Luis Hernández Navarro.
Con información de La Jornada