MÉXICO (Notimex) 17 de diciembre de 2018.- El Tren Maya, que arrancó las obras de Rehabilitación de las vías férreas Palenque-Escárcega, será un detonador del desarrollo socioeconómico en el sureste de México.
El proyecto promueve un esquema turístico en el que los visitantes recorren las comunidades de la región evitando la concentración turística en un solo punto. Así, se genera una derrama económica local, se crean oportunidades laborales y se distribuye la riqueza a lo largo de la península.
De acuerdo con el portal del Tren Maya, éste se basa en un modelo de desarrollo sostenible que impulsa el crecimiento económico sin depredar el ambiente; sino por el contrario, procura medidas de mitigación, compensación y protección del entorno como la creación de corredores ecológicos en el margen de la Reserva de la Biósfera de Calakmul para contener la presión del crecimiento poblacional y la actividad humana. El presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, ha reiterado que no se derrumbará un solo árbol y se protegerá la riqueza natural de la zona sur-sureste.
La locomotora de biodiesel híbrida acorde a la norma ambiental de California será de mil 525 kilómetros de recorrido en 15 estaciones y recorrerá a una velocidad de 160 kilómetros por hora.
La inversión estimada de la infraestructura de la vía del tren será de 120 a 150 mil millones de pesos que se obtendrán a través de un esquema de inversión mixta.
También, de inicio se invertirán seis mil millones de pesos en 2019 y será necesaria la participación de la iniciativa privada, por lo que los empresarios podrán participar en la licitación que en dos meses se lanzará para los primeros cuatro tramos.
El Tren Maya ofrecerá tres tipos de servicios: transporte de carga, concesión para tren turístico y tren de pasajeros para los pueblos; y la administración de las estaciones quedará a cargo de gobiernos locales y federal.
De acuerdo con el gobierno federal, el proyecto promueve un esquema turístico en el que los visitantes recorren las comunidades de la región evitando la concentración turística en un solo punto, lo que permitirá generar una derrama económica local, crear oportunidades laborales y distribuir la riqueza a lo largo de la península.
VP/Economía/EZ