MÉXICO, (Sputnik), 2 de noviembre de 2020 .- El jefe de la Oficina de la Presidencia de México, Alfonso Romo Garza, consideró que tanto la regionalización de las cadenas de valor como la guerra comercial entre Estados Unidos y China ponen las bases para que el país latinoamericano logre una rápida recuperación económica.
“Si se arrecia esta guerra comercial, entonces por todos lados se están alineando las estrellas para que México se convierta en el paraíso de la inversión“, destacó.
“El presidente es un gran promotor, le encanta oírlos y entenderlos de primera mano, eso nos ayuda mucho en la comunicación”, mencionó.
Sin embargo, el jefe de la Oficina de Presidencia consideró que otro punto importante es que el actual gabinete de López Obrador entienda que la mejor manera de capitalizar las oportunidades que se abren para el país requiere de la inversión privada.
Aunque algunos expertos han advertido que las decisiones del Gobierno mexicano en materia energética generan incertidumbre y, por ende, pueden dificultar beneficiarse del conflicto entre China y Estados Unidos, Romo sostuvo que la Presidencia está enfocada en llegar a acuerdos con todos los actores del sector energético, aunque siempre con el objetivo de recuperar a las estatales Petróleos Mexicanos (Pemex) y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
“Lo que estamos haciendo es evaluar dónde está la realidad y qué es lo mejor para el país. Hay un grupo que dice que estamos subsidiando, y otro que decimos que no tanto. No tengo duda de que tener la soberanía energética es importante, pero si importamos 90% del gas, no somos soberanos… Y si la conclusión es que las renovables son el futuro, porque para allá va todo mundo, pues sí, pero cuidado con las tendencias porque el mundo va para un lado y luego se regresa”, apuntó en entrevista con Milenio.
En mayo de 2019, Alfonso Romo se comprometió a que el Gobierno de México aprovecharía la guerra comercial entre Estados Unidos y China para atraer inversiones extranjeras en el marco del Tratado México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) que entraría en vigor en julio de 2020.
Pese a la pandemia, en agosto México registró un superávit de 12.759 millones de dólares en su balanza comercial de productos con Estados Unidos, lo que significó un máximo histórico. Esta tendencia se mantuvo en septiembre, cuando el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dio a conocer que el valor de las exportaciones de mercancías mexicanas a la Unión Americana alcanzó los 38.547 millones de dólares.
En 2019, las importaciones y exportaciones de México representaron el 72% del Producto Interno Bruto del país latinoamericano. Según el Banco Mundial, de las veinte mayores economías del mundo, sólo Alemania y Tailandia cuentan con un índice de apertura mayor al mexicano.