Los combatientes del Estado Islámico han ejecutado en la ciudad iraquí de Mosul a medio millar de empleados de comités electorales. Unos 300 de ellos fueron fusilados en un campamento militar “por ser apóstatas e infieles”, entre ellos al menos 50 mujeres. Otro grupo de trabajadores fue degollado, según ha confirmado la Comisión Electoral Central de Irak, informa Press TV.
Un yihadista aseguró a los familiares de las víctimas que dentro de unos días se hará pública la lista completa de las 500 personas ejecutadas.
Con información de RT