Washington/ Ankara.- El gobierno de Estados Unidos decretó hoy nuevas sanciones contra Irán, en respuesta al ensayo de un misil balístico efectuado en el país persa el pasado fin de semana, según informó el Departamento del Tesoro en Washington.
Estas nuevas sanciones, no relacionadas con el programa nuclear de Teherán, afectan a 25 personas o entidades sospechosas de haber aportado un apoyo logístico para los misiles balísticos iraníes, señala el departamento del Tesoro en un comunicado.
“El apoyo continuo de Irán al terrorismo y el desarrollo de su programa de misiles balísticos constituye una amenaza para la región, para nuestros aliados en el mundo y para Estados Unidos”, afirmó John Smith, director interino de la unidad encargada de las sanciones financieras (Ofac).
Esta nueva serie de sanciones fue revelada cuando Estados Unidos acaba de advertir a Irán por haber realizado el domingo un ensayo de misil. Teherán había denunciado el jueves amenazas “sin fundamento, repetidas y provocadoras”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo el viernes en su cuenta de Twitter que “Irán está jugando con fuego” y que las autoridades de la república islámica “no aprecian lo amable que fue el presidente Obama con ellos. ¡Yo no!”.
De acuerdo con las sanciones aprobadas por el Tesoro, dirigidas sobre todo contra una red de apoyo en China, las personas y entidades afectadas sufrirán el congelamiento de sus eventuales haberes en Estados Unidos y no podrán hacer transacciones con personas e instituciones estadounidenses.
Trump busca aumentar la presión sobre Teherán mientras elabora una estrategia más amplia para contrarrestar lo que considera como un comportamiento desestabilizador, afirmaron ayer fuentes cercanas al tema.
La decisión de Irán de probar un misil balístico el domingo ayudó a poner en marcha la decisión de Trump.
El pasado fin de semana Irán probó un misil de crucero. Lo lanzó desde Semnan, a unos 225 kilómetros de Teherán. El proyectil recorrió 965 kilómetros antes de estallar.
La prueba podría haber violado la resolución 2231 de la ONU, que insta a Irán a no lanzar misiles balísticos con capacidad nuclear.
Por su parte, el ministro de Relaciones Exteriores iraní, Mohammad Javad Zarif, tuiteó que su país es indiferente a las amenazas de Estados Unidos y que Teherán nunca iniciaría una guerra.
“Irán es impasible ante las amenazas, ya que nuestra seguridad proviene de nuestro pueblo. Nunca empezaremos una guerra, pero solo podemos confiar en nuestros propios medios de defensa”, escribió Zarif.
El ministro iraní manifestó además que Teherán no tenía intención de usar su poderío militar contra ningún país, sino sólo como defensa.
“Nunca usaremos nuestras armas contra nadie, excepto como defensa propia. Veremos si quienes se quejan pueden decir lo mismo”, agregó Zarif a través de Twitter.
Un asesor del líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, dijo ayer jueves que Teherán no cedería ante amenazas “inútiles” de Estados Unidos expresadas por una “persona sin experiencia”.
(Nota de DPA, AFP y Reuters en La Jornada)