La Comisión para el Acceso a la Verdad, el Esclarecimiento Histórico y el Impulso a la Justicia de las violaciones graves a los derechos humanos cometidas de 1965 a 1990, concretó una de las demandas históricas de víctimas, familiares de personas desaparecidas y colectivos para llevar a cabo las primeras acciones de reconocimiento en instalaciones militares del Campo Militar No. 1-A.
A las instalaciones castrenses ingresaron desde el día de ayer 61 personas, entre familiares de personas desaparecidas y víctimas, quienes han manifestado haber sido objeto de violaciones a los derechos humanos cometidos en las décadas de los años sesenta al noventa. La selección de los espacios que se están inspeccionado se basó en documentación militar y en testimonios de sobrevivientes y personas que han formado parte del servicio público.
Las acciones de reconocimiento, que concluirán el 22 de septiembre, tienen el objetivo de identificar espacios dentro del Campo Militar No. 1-A, en los que presuntamente se cometieron violaciones graves a derechos humanos y documentarlos con metodología pericial.
Para esta inspección, la Comisión para la Verdad se hace acompañar de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y su personal de visitadurías, y de la Comisión Nacional de Búsqueda con peritos criminalistas, arquitectos y de acompañamiento psicosocial.
Los familiares de personas desaparecidas y sobrevivientes han estado acompañados por personal de la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, del equipo técnico de la Comisión de la Verdad, la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas, el Mecanismo de Esclarecimiento Histórico, el Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, y de la propia Secretaría de la Defensa Nacional.
Tras esta primera incursión, la Comisión para la Verdad continuará con el proceso de inspección en aquellos puntos que las personas sobrevivientes y familiares señalen como posibles sitios de detención clandestina.