MÉXICO (Notimex) 08 de octubre de 2019.- A dos años de haber sufrido tortura y violencia sexual por elementos de la fuerza pública de Tlapa de Comonfort, Guerrero, la activista Yndira Sandoval denunció que la Fiscalía General de la entidad no tiene ningún avance del caso ni ha fincado responsabilidad contra los funcionarios involucrados en los hechos.
En conferencia de prensa y acompañada por activistas de la organización “Las Constituyentes de la Ciudad de México”, de la cual es fundadora, aseguró que ha quedado de manifiesto la impunidad como la principal línea política e institucional por parte de la fiscalía de Guerrero.
Además, esa instancia es responsable de la filtración a redes sociales y medios de comunicación de información sensible sobre su denuncia, y de videos que formaban parte de la cadena de custodia de prueba de la carpeta de investigación.
“Me colocaron como blanco de una desmedida y desproporcionada avalancha de actos de revictimización, estigmatización y criminalización hacia mi persona, mi nombre y mi honor teniendo como principales consecuencias el generarme una situación de riesgo inminente derivado en atentados graves como son el allanamiento a mi casa en la Ciudad de México”, reprochó.
La activista recordó que interpuso una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) el 04 de octubre de 2017, y ésta emitió una recomendación sobre su caso, dirigida a la Fiscalía de aquella entidad y al gobierno municipal de Tlalpa de Comonfort.
Ese organismo, expuso, acreditó la violación a su derecho a la integridad personal por actos de tortura y violencia sexual, la violación a la justicia, a su derecho a la privacidad y a una vida libre de violencia por parte de funcionarios públicos.
Ante ello, exigió justicia y el cumplimiento efectivo de la ley contra los funcionarios responsables, para que sean investigados y sancionados conforme a la ley.
Asimismo, demandó la reparación integral del daño a su persona, principalmente la garantía de medidas de no repetición y de satisfacción, así como una disculpa pública del gobierno de Guerrero, la Fiscalía General del estado y el gobierno municipal de Tlalpa, con base en la ley General de víctimas y a lo establecido en la recomendación emitida por la CNDH.
Yndira Sandoval subrayó la importancia de creer siempre en la palabra de las víctimas, pues ante actos como la tortura sexual, es con lo que cuentan, lo de mayor valor. “En este caso mi palabra y mi dignidad es lo que con mayor valor poseo estando viva”.
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