Tras casi cinco meses en que organizaciones sociales y activistas de la Ceteg tomaron el ayuntamiento de Acapulco, ayer por la mañana entregaron a las autoridades todas las instalaciones.
Lo anterior luego de haberse firmado una minuta de 15 puntos en la que autoridades del gobierno federal, estatal y municipal se comprometen a cumplir los acuerdos con todos los integrantes de organizaciones sociales, ejidales, transportistas, activistas de la Ceteg y el Movimiento Popular Guerrerense (MPG).
El pasado 23 de octubre, integrantes de organizaciones sociales agrupadas en el MPG y la Ceteg, tomaron la comuna porteña como parte de las acciones que realizaban maestros y normalistas por la desaparición de los 43 normalistas en Iguala, el pasado 26 y 27 de septiembre.
En aquella ocasión, estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa y docentes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación de Guerrero tomaron pacíficamente el palacio de gobierno de Acapulco.
El vocero de la Ceteg, Walter Emanuel Añorve Rodríguez, indicó que la toma de las instalaciones se haría de manera pacífica y así fue, pues a lo largo de casi cinco meses no hubo actos de violencia.
Ayer por la mañana a la explanada del palacio Municipal arribaron el delegado de Gobernación, un representante del gobierno estatal, el alcalde porteño, Luis Uruñuela Fey, y los notarios Arturo Betancurt y Arturo Nozari Morlet, quienes dieron fe de la minuta.
Ahí leyeron los 15 puntos que plantearon los representantes de las organizaciones sociales y las autoridades de los tres niveles de gobierno y reprocharon que fue demasiado tiempo el que estuvo tomada la alcaldía.
“El primer acuerdo es que se presenten con vida a los 43 alumnos desaparecidos de manera forzada en Ayotzinapa, la presentación con vida de los desaparecidos en el país desde 1987 a la fecha, cuando se integró el Frente de Reconstrucción Nacional, y justicia para todos los asesinatos de 2000 a 2015, por esa guerra absurda contra el narcotráfico”.
Incluso plantea la liberación de todos los presos políticos del país, la desmilitarización de la república, así como el reconocimiento legal de las policías comunitarias, el rechazo a las mineras y a la hidroeléctrica la Parota.
Hecho lo anterior se inició un recorrido por las instalaciones de la comuna porteña donde se encontró un mural con el rostro de los 43 normalistas en las alas de un águila y las icónicas imágenes de Genaro Vázquez y Lucio Cabañas.
Con información de Milenio