La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró las obras de ampliación y remodelación del Hotel Me by Meliá Cancún, en la zona turística de Cancún, en Quintana Roo, ya que carece de autorización en materia de Impacto Ambiental expedida por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
La Profepa indicó que hay afectación en 25 mil 045 metros cuadrados de superficie, con daños a vegetación de Palma chit y fauna local como la iguana gris, especies protegidas de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010.
“Estos ejemplares de fauna y flora silvestre representan los remanentes de un ecosistema natural de duna costera, cuya importancia del litoral donde se retiene la arena que forma la playa, producto de acumulación de residuos coralinos que le dan belleza a las playas de Cancún”, refirió la Procuraduría.
En el lugar se realizó la construcción de dos edificios de cuatro niveles, una cisterna, la remodelación del hotel principal y jardineras, así como excavaciones y remoción de suelo, todas sin contar con autorización de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).
El predio donde está el hotel, refirió la Profepa, está muy próximo a la Laguna de Nichupté, declarada como Área Natural Protegida (ANP) por las especies endémicas y el frágil ecosistema de humedal costero que presenta.
De ahí que con la clausura de las obras se evitará afectar la duna costera y la playa, que es lugar de anidación de tortuga marina, y se detiene la ampliación desordenada de desarrollos turísticos.
Destacó que la duna y el matorral costeros conforman la barrera natural de protección en una franja de tierra y arena, que limitan un cuerpo de agua extenso que da origen a la laguna de Nichupté.
“Los ecosistemas deben protegerse en la zona para otorgar estabilidad ambiental y continuar con servicios ambientales, como la captura de carbono y la retención de suelo y agua que previene la erosión de playas”, resaltó la Profepa.
La Profepa señaló que se impondrán medidas de restauración para lograr la recuperación del ecosistema, que pueden ser de hasta 50 mil Unidades de Medida y Actualización, de acuerdo con la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.
También se elaborarán las denuncias penales correspondientes, que de acuerdo al Código Penal Federal podrían alcanzar penas desde uno a nueve años de prisión y de 300 a tres mil días multa.
(Nota de Blanca Estela Botello para La Crónica)