RAZÓN, TESÓN Y CORAZÓN
Por Alejandro Ruiz Robles
“Por qué se es un hombre, ¿por lo que tiene? Si no es él mismo, entonces no tiene nada. Decir las cosas que realmente siente y no las palabras de alguien que se arrodilla. Mi historia muestra que encajé los golpes .., y lo hice a mi manera. …. Sí, fue a mi manera.”
(A mi manera, Paul Anka. 1969)
DE LOS GUARDADITOS.
La vida es una sola; sin embargo, a veces nos detenemos a pensar en diversos momentos que hemos tenido y la fragmentamos en específico con el propósito de analizar o bien, disfrutar más a detalle de cada momento.
Cada instante tiene un valor distinto, de manera que los que aquilatamos más por su aporte, plenitud o alegría, los ponemos en un sitio especial; por el contrario, los que nos provocaron dolor, ansiedad o molestia son archivados con la intención de olvidarlos con el tiempo y los que son intrascendentes o no representan nada en sí mismos, no los procuramos de ninguna manera.
Es obvio que, a pesar de haber sido disfrutados, también hay una jerarquía entre ellos; de manera tal que, habrá un orden de preferencias.
Algunos pondrán el nacimiento de sus hijos, su matrimonio, la fecha en que se titularon, un ascenso en especial, una distinción recibida, un premio obtenido, una victoria lograda; en fin, todo dependerá de cada persona.
Dicen que los momentos buenos son los que nos sirven para dar una mejor salida a aquellos que no nos hacen gracia y es posible que sea así.
En casa aprendí a llenarme con las alegrías para que cuando fuera necesario, las tristezas no me impactarán tanto; de hecho, buscaba que las primeras me motivarán de tal manera, que minimizarán las segundas hasta lograr recuperarme y continuar mi camino. Para la penumbra, siempre es útil la luz y que mejor que proyectar la que llevamos en nuestro corazón.
Tu actitud es determinante para levantarte en las caídas o … ¿conoces a alguien que disfrute estar en el piso?
VIVIR “BONITO”.
Si bien es cierto que aislamos ciertos momentos de nuestras vidas, no debemos entender por ello que sólo vivimos “de lo bonito”.
Recordemos que las rosas por más bellas que sean también tienen espinas; razón por la cual, nos extasiamos con sus pétalos y nos alejamos de sus extremos punzantes.
Clasificar los momentos extraordinarios, buenos, regulares y malos a veces lo hacemos con el ánimo meramente de distinguirlos y aquilatarlos por su importancia; en el entendido que todos son parte de nuestra historia y la enseñanza está en ellos, todo depende de saberla obtener y encauzar.
Alguien me hacía la analogía de la vida de las personas con las casas productoras de bebidas alcohólicas, refiriéndose a que ellas producían y vendían sus productos con diversas etiquetas, la roja para los productos básicos, la negra para los de mediana calidad y la azul para los de mejor degustación. Al final, todos son sus productos, pero ellos tienen la capacidad de distinguirlos, así, nuestras vivencias tienen un valor y lugar para nosotros, pero por más que queramos distanciarlas o minimizarlas, al final son parte de nuestra producción, de nuestro acervo vivencial.
Por más que busquemos negar lo vivido, siempre estará en nosotros y su impacto será tan grande como lo queramos.
Si bien, no somos frágiles ni mucho menos fortalezas, la vulnerabilidad dependerá de nosotros en función a nuestras condiciones físicas y a nuestros conocimientos, valores y experiencias.
El contenido de cada hecho tendrá un mensaje … ¿qué valor le das a tus vivencias?
ES COMO LA VIDA MISMA.
Hay a quien le gustaría sólo quedarse con los momentos que le satisfacen de su vida, omitiendo cualquier sensación de incomodidad y molestia y con ellos, a manera de “lego”, construir un palacio en el cual se sientan seguros y puedan albergar su historia positiva.
De tal manera, prescindirían de todas aquellas cosas que con su actual forma de ser no les representen valor, tales como: los regaños de niño, las lágrimas por desamores, los castigos escolares, las consecuencias de ciertas acciones, sus frustraciones y, en entre otros, sus duelos.
Esto que suena tentador; sin embargo, no lo es tanto. La razón es sencilla, hoy eres la suma de un todo, que comprende éxitos y fracasos, alegrías y tristezas, etcétera. Por más que fuera deseable, lo difícil que te ha tocado vivir te ha formado … ¿qué tanto? … nunca lo sabremos.
No conozco a nadie que haya ido por la vida entre nubes y algodones; ni mucho menos, que con ello se haya forjado un carácter fuerte que le permita alcanzar sus objetivos.
En consecuencia, por más que se quisiera tener una varita mágica y desaparecer todo aquello que nos incómoda o lastima; de hacerlo, con ello también nosotros desapareceríamos como nos conocemos y quedaría una versión que no somos a plenitud.
¿Te gustaría tener una vida linda sin ti viviéndola?
FANTASÍA.
No falta que alguien mencione que su vida es “un cuento de hadas” para asumir que lo que existe en su realidad es increíble, con la magia suficiente para hablar de un mundo fantástico; sin embargo, en todo cuento hay ogros y por más que haya luz, también hay penumbra.
Como personas de fe, no faltará quien señale que todos tenemos “tentaciones y demonios” y eso es lógico, razón por la cual, la opción que cada uno de nosotros tenemos es decidir cómo queremos vivir y definir nuestras prioridades. Desde luego al ser personas de fe, asumir que son nuestras creencias y valores, los que nos llevaran a estar cerca de nuestra deidad.
En cuanto a aquellos que son pragmáticos y ven en este plano la totalidad de su existencia, verán y apreciarán que todo lo que han pasado es por alguna razón y como tal, tendrán que sumar todo lo vivido y hacerlo simple. En fin, la vida tendrá muchas formas de ser vista, pero tú tienes la oportunidad de disfrutarla a tu manera……….. ¿la miraras y admiraras?
DE LECCIONES Y ELECCIONES
Con los años nos damos cuenta de que todo lo que hemos vivido es por algo; en el entendido que no siempre tenemos explicación para ello o la respuesta adecuada.
Por más que queramos crear bloques que contengan en nuestra mente y corazón los momentos como nos parezca adecuado clasificarlos y busquemos darles un orden distinto a como ocurrieron, concluiremos que el orden debido es como sucedieron.
Somos parte de diversos sistemas y las cosas pasan cuando deben pasar; razón por la cual nosotros debemos continuar nuestro andar cargando con lo pasado, pero siempre con la actitud de aprender de todo y sobre todo, motivarnos con aquello que nos ha hecho mejores personas.
¿ESTAS EN CAMINO DE SER TU MEJOR VERSION?
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Posdata: Agradezco al Maestro Jorge Eduardo De León Palma que me haya considerado para presentar la 2ª. Edición de su libro “Extraño Enemigo”.
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