Voces del Periodista Diario

“Evidencia” OVNI, ET, VET y fútiles bromas similares

Crónicas de lo inexistente

 Madure 007, madure.”

El reciente “destape” de documentos oficiales de los EE.UU. sobre la intención de investigar —de nueva cuenta—, los FANI (Fenómenos Atmosféricos No Identificados) alborotó el avispero de los supuestos “ufologos”, palabreja en “españinglés”, que se supone define a los “investigadores” de los ovni (objetos volantes no identificados). Aunque los documentos no mencionan una sola vez las siglas “ovni”, “extraterrestres” o “naves” los creyentes en visitas extraterrestres, aullaron a los cuatro vientos “que los militares de EE.UU. y su gobierno ya habían oficializado a los ET visitantes”. Algo totalmente fuera de la realidad o de la verdad.

         Estos individuos que con fervor religioso y cuasi bíblico (ese panfleto muy ignaro popular que se dice “es la palabra de dios”), defienden sin razón alguna a los “visitantes ET”, se lanzaron de inmediato, cual Zeugen Jehovas, a tratar de catequizar a los incrédulos y escépticos.

         Pero bien, ¿cuál es el génesis de todo esto?

Génesis de una impostura

Entre la farsa, la alucinación, y la esquizofrenia, el fraude y la búsqueda de notoriedad, el llamado fenómeno ovni contemporáneo se inició el 24 de junio de 1947, con el avistamiento —horrible neologismo que en este caso “define” la visión generalmente borrosa de algo desconocido—, por parte de un piloto aviador aficionado y exitoso vendedor ambulante de nombre Kenneth Arnold, sobre el monte Rainier en los EUA de los en mala hora llamados platillos voladores, bautizados así por un reportero despistado, ante la descripción de Arnold sobre lo que había visto u creído ver, en cuanto a la forma el único testigo dijo que parecían más bien salseras; saucers. La inmediata enseñanza de esto es que no debe confundirse la objetividad, con la subjetividad; hacerlo da paso a la especulación irracional.

Por supuesto, también el negocio, se inició de inmediato, por parte del propio Arnold, por supuesto ya que a pesar de sentirse molesto por la interpretación errónea del reportero (se muestra una ilustración de lo que Arnold dijo haber visto, nada que ver con “platos”), comenzó a cobrar por sus entrevistas y no tardó mucho en declararse una especie de “investigador” que se compró una cámara de ocho mm para filmar lo que pudiera encontrarse, al parecer fue el inspirador de los “vigilantes maussanitas®”…

         Pasada la sorpresa inicial, unas pocas personas pensantes procedieron a investigar el asunto y por supuesto a buscar pruebas de lo que se pretendía estaba ocurriendo, los investigadores pensantes del “fenómeno ovni” y de los supuestos ETs —que también existimos y de hecho somos los únicos que investigamos—, seguimos esperando las evidencias para poder estudiar algo… Cualquier tipo de evidencia o prueba verdadera.

En los más de 50 años, desde que el tal Arnold inició el baile, no existe una sola evidencia material de la existencia denaves extraterrestres”… al menos como cual pretenden los “contactados”, en su mayoría personas que o están mal de la cabeza —como los conspiranoicos—, buscan notoriedad o son simple y llanamente unos charlatanes descarados. Y, vale la pena aclarar que OVNI no es ni ha sido jamás sinónimo de “nave”, al igual que FANI y OVNI son siglas que definen “algo”, si fueran vehículos o “naves” de fuera de este planeta, deberían ser llamados VET (vehículos extraterrestres), pero esto, como se ha visto desde 1947, carece de fundamento racional.

Es de manera simple; cháchara de charlatanes…, como la de varios que conocemos aquí en los EUM.

Entre la ignorancia, la futilidad y la farsa

Las “pruebas”  de ET van del infantilismo, a la más fehaciente muestra de ignorancia, de acuerdo con los decálogos ovni, de cualquier investigador serio, de fenómenos aéreos supuestamente no identificados.

Cuando hay evidencia de alguna clase fuera de lo anecdótico, sobre los objetos volantes no identificados, estos suelen convertirse casi de inmediato en OVIS (objetos volantes identificados), como en el Caso Puebla, (se muestra un fragmento restante luego de los análisis, del “metal que cayó del cielo” en la Sierra  Norte de Puebla)…

Lo cual demuestra que no hay cosas imposibles de identificar, sino solo personas incapaces de identificar lo que ven, por ignorancia, enfermedad mental o deseos de notoriedad, amén de evidente mala fe en muchos casos.

El único interés civil que reviste la “casuística ovni” es el psicosocial, esto es; el estudio de las personas que dicen ver “naves” y otras cosas, y mediante esto, su posible impacto en los sistemas de creencias y en la creación de mitos y religiones.

¿Más ejemplos de “evidencias” inválidas?

Las fotografías del refrigerador de Adamski, las diversas “piedras” extraterrestres (cuarzos, piedras de río y uno que otro coprolito), el esqueleto ET de Playa Eréndira (que era una cabeza de tiburón), el brazalete “tele transportador” del enfermo mental Jonathan Reed, del cual platica mucho cuando hay dinero de por medio (como todo contactado charlatán), pero jamás ha mostrado y mucho menos demostrado cómo funciona (si tal idiotez existiera), lo cual sería la manera indiscutible de callarnos la boca de inmediato a nosotros los escépticos, convencernos de lo que dicen y de paso dar algo que estudiar a los científicos de verdad.

En caso de que tuviéramos visitantes extraterrestres, ¿serán tan pentontos los pobres ET que necesitan a contactados idiotas, como el infame Reed, y otros que sería prolijo enumerar, para darse a conocer?

También, como parte de esta fauna, conocimos a un vendedor de pizzas arturianas —por  la estrella Arturo—, lo cual puede dar una idea clara de la clase de especímenes que pululan por estos sitios…

Seguramente éste —el “pizzero”—, argumentará que la forma de las pizzas le fue dada por los ETs a los italianos —seguro de la fratelanzza cosmica—, como una prueba de su existencia; de los ETs claro, no de los italianos o las pizzas, cuyo origen es bien conocido.

Una vez el exsimio —no eximio, ojo—, Erich Von Däniken —un ex hotelero metido a charlatán—, trató de hacer lo mismo con las mexicanotas tortillas ante la indignación zacapoaxtla, la advertencia de una casi inmediata demanda en dólares disuadió velozmente al advenedizo.

No hay, repetimos por enésima vez, una sola prueba ni siquiera medianamente creíble, de las afirmaciones demenciales de ET en este planetita y es así, porque jamás los ha habido por estas vecindades.

Como no sea en la literatura de cienciaficción, la cual si vale la pena leer y en la ovnilatría, que está bien para débiles mentales y maussanitas®.

Y, una de las más reciente muestras de —ya no sabemos si de ingenuidad, síndrome de idiotez o ignorancia—, la dio hace unos años el entonces señor secretario de la Defensa Nacional llevando a “analizar” una supuesta evidencia ovni a un notorio charlatán, y justificando tal actitud con la babosada de que “él no conocía científicos” ¿qué, la UNAM y su Facultad de Ciencias, los astrónomos, físicos, el IPN, etc., están pintados?

Bueno, en fin no podía esperarse más de un milico

En un programa de radio el charlatán y contactado de marras, ese que mencionamos —el cual había proclamado por enésima vez que ahí estaba la prueba irrefutable de la presencia ET—, se indignó tanto —siempre lo hace ante su evidente falta de argumentos válidos—, que abandonó el programa de radio al aire, cuando un conocido escéptico planteo dudas sobre su seriedad y la del general, ante semejante gazapo… el “bizarro” milite, por su parte, no dijo esta boca es mía.

Para fortuna de la Sedena

Ahora que, y eso sí, cada quien puede creer en lo que quiera, y claro, también tiene derecho a que le vean la cara de pen…tonto los líderes maussanitas®, una y otra y otra vez y, ya de paso los panistas, quienes no cantan nada mal los mitos, para furia del ex abad de La Villa, Mons. Schüllenburg quien, desde su millonario retiro, parece sentir que usurpan su creación del “mito genial”…

La buena noticia, si es que la hay, fue que no llegó a opinar al respecto el —antes de fallecer—, conocido como San Carlos María Abascal, Monseñor de Bucareli, quien seguramente habría llamado a los ET—igual que el eximio Jacques Vallee—: FG (fenómeno guadalupano).

Pero sospechamos que los creyentes ovnílatras, como algunos amigos y conocidos, seguirán tratando de convencerme de que sus tontas creencias tienen algún tipo de validez…

RECUADROS:

Decálogo militar OVNI… Copyright 2008

Todos los derechos reservados ©Héctor Chavarría

(Se permite reproducción citando fuente).

  

Decálogo militar ovni©

 

1.– El OVNI es real, es cualquier cosa sin identificar en el aire, de ahí sus siglas, un término que nació con la aplicación militar del radar, aunque es inapropiado llamar “objeto” a algo desconocido, el término correcto es fenómeno aéreo o atmosférico.

2.– La ovnilogía es un conjunto de técnicas para investigación militar, con aplicaciones militares y su finalidad es identificar, no especular.

3.– La creación de la ovnilogía obedeció en su momento (1947) a la creencia justificada en una amenaza militar real, desde el punto de vista igualmente militar de soviéticos y gringos.

4.– La incidencia en casuística OVNI o FANI, crece proporcionalmente a la ignorancia, en términos reales, del testigo.

5.– En ovnilogía una imagen NO vale por mil palabras; lo de la validez de una imagen en tales casos, es un término periodístico, no premisa para una investigación, además de las miles de falsificaciones…

6.– No hay “objetos voladores no identificados” fuera del ámbito militar; sólo hay personas incapaces de identificar lo que ven. Con casi toda seguridad FANI; Fenómenos Atmosféricos No Identificados.

7.– La ignorancia acerca de FANI crea muchas confusiones, pero lo ignaro se cura con estudio y conocimientos, con investigación y escepticismo, este último básico para investigar cualquier cosa. La necedad es incurable, como la fe a ultranza.

8.OVNI y  presunta “nave extraterrestre”, o VET, NO son sinónimos.

9.– La ovnilogía, como la practican sus actuales “seguidores” es irreal o sea “ovnilatría” esto es; un absurdo sistema de creencias, sin método alguno. A lo visible del fenómeno, le quedan mejor las siglas FANI; fenómeno atmosférico no identificado, pues “objeto”, presupone que se trata de “algo” fabricado.

10.– La ovnilogía como tarea militar finalizó hace muchos años y sus resultados han sido ampliamente publicados. Ya no hay ovnílogos civiles, sólo ovnilocos, ovnílatras y ovnilacras que como ciegos, siguen a charlatanes, o lo son…

Como plus; no hay una sola afirmación etélatra, que no haya sido puesta antes como literatura, por la cienciaficción.

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Decálogo creyentes en ETs… Copyright 2008

Todos los derechos reservados ©Héctor Chavarría

(Se permite reproducción citando fuente).

 

DECÁLOGO SOBRE ETELATRAS

1.- Las posibilidades de vida extraterrestre (ET), son infinitas, su visita a este planeta es demasiado improbable; por el no pequeño detalle de las distancias reales y que las velocidades “híper lumínicas” son de la cienciaficción (cf).

2.- Hasta la fecha ninguna persona ha visto una “nave extraterrestre” y aportado pruebas concluyentes de tal evento, sólo se reportan “no identificados”, por incompetencia para identificar o simple ignorancia sobre lo que es un FANI.

3.- Las supuestas “pruebas” de contacto ET —por consiguiente—, se basan en la ignorancia o en la creencia ciega en “la visita”, que es hija de la misma.

4.- La única prueba válida de la existencia de “un objeto extraterrestre” sería el “artefacto” mismo, o el propio ET. Y su estudio y contacto inteligente correspondería a la ciencia y a los métodos científicos; no a un taxista en la Calzada de los Misterios.

5.- Una prueba válida así, la que fuera, tendría que ser un objeto extraterrestre permanente (OETP) o el contacto directo, explícito y constante con una inteligencia ajena a este planeta.

6.- Los más interesados en hallar vida ET, son los integrantes de la comunidad científica y, los únicos que investigan al respecto.

7.- Sólo la ciencia está haciendo esfuerzos verdaderos por esclarecer la posibilidad ET. Y que, lo ET puede ser, desde una bacteria.

8.- El mensaje de un “contactado por ETs” jamás ha excedido, ni es probable que exceda, el nivel de los propios conocimientos del “contactado”. La ignorancia sólo demuestra su propia naturaleza.

9.- La investigación, en especial lo relacionado con visitas ETs, se torna imposible ante la falta invariable de evidencias reales.

10.- Todos los conceptos, mensajes y declaraciones dados hasta hoy por “contactados”, “secuestrados”, “violadas” y demás fauna, han sido sacados de la cf popular, inventados con poca imaginación y fines de fraude o son simple y llanamente, productos de mentes enfermas; esquizofrénicas, de conspiranoia o por la necesidad mística de creer en algo superior…

*

 (*) Único Académico del fenómeno OVNI (Academia de Folclor y Tradiciones), en la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística, periodista, escritor, Socio Fundador de Asume 19, SoMIE y de AMCyF, ex columnista de Excélsior y colaborador de Voces del Periodista, socio activo del Club de Periodistas de México, Premio Nacional de Periodismo, Premio Internacional Andrómeda de Literatura cf, instructor de supervivencia y miembro emérito del Socorro Alpino de México…

Sugerencias, aplausos  o mentadas: ekthor1950@yahoo.com.mx

 

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